La morosidad en el alquiler baja, pero aún supera los 4.100E de media

La morosidad en el alquiler en Burgos sigue siendo de las más altas de la región. Los impagos ascienden a 4.180 euros por inquilino, lo que se traduce en una media de nueve meses sin abonar la renta del alquiler. Pero al mismo tiempo cabe destacar que este índice del Fichero de Inquilinos Morosos que edita FimIbérica refleja que Burgos es una de las tres provincias de la región donde esta morosidad ha bajado. Hay un 1,31% menos de impagos de la renta en la provincia de Burgos.

Un fenómeno que no viene dado por la salida de la provincia de la crisis o una bajada de precios sino por que la situación en la provincia estaba sobredimensionada. «La morosidad en Burgos ha crecido más otros años, en el índice supera los 500, fue de las que más creció en años anteriores y el sistema llega a un punto en el que se mantiene y deja de aumentar», explica el director de Estudios y Calidad de Fichero de Inquilinos Morosos, Sergio Cardona.

Así el índice de morosidad que se calcula en el informe de FIM Ibérica se refleja como en 2007 este índice estaba en 244 y subió año tras año hasta los 569,37 en 2016. Ese ha sido su techo porque en los dos ejercicios posteriores el índice ha bajado hasta 554,23 en 2017 y 546,97 en 2018.

Pero el riesgo está en que, a pesar de que se haya alcanzado el techo de morosidad en la provincia, este pueda verse comprometido por la preocupante fluctuación al alza del mercado, especialmente en la vivienda más barata. «Cuanto más crece el predio del alquiler y más esfuerzo hacen los inquilinos para pagar la renta y la situación se presenta en un entorno de inestabilidad de ingresos, es más fácil que exista morosidad», explica.

Algo que parece darse en Burgos donde los alquileres más baratos ya cotizan a más de 500 euros y el precio medio ha subido hasta los 604 euros de media en marzo de 2009 según el portal Enalquiler.com. Mientras tanto los ingresos inestables se mantienen entre la población burgalesa donde la contratación temporal alcanza cotas del 90% de los empleos generados. Pero y con todo esto la situación se ha corregido, yendo la provincia de Burgos a contracorriente que el resto del país. «La morosidad no remite, en la mayoría de las provincias aumentan porque los ingresos de los arrendatarios no han subido pero los precios sí y, además, entre 2016 y 2019 los precios sean recuperado de manera muy rápida», explica Cardona.

Miedo al impago

El temor a la morosidad y cómo hacer frente a ello lleva a muchos particulares a dejar su vivienda vacía y sin uso. Desde FimIbérica señalan que la tranquilidad se basa en información. El alquiler seguro existe y se basa en contrastar datos para determinar las posibilidades a futuro de un proceso de este tipo.

«El miedo está ahí porque entre que se produce el primer impago hasta que se efectúa una denuncia han pasado tres meses o más. A ello hay que sumar el tiempo en el que el juzgado comunique el alzamiento se pueden pasar en entre una cosa y otra entre siete y 12 meses sin que se abonen las rentas», señala el responsable de estudios de la entidad que atiende más de un millón de consultas al año procedentes de toda España.

Reconocen que el principal miedo al alquiler es saber cómo se van a encontrar el inmueble y si le pagarán a tiempo pero «queremos decir que se puede alquilar con seguridad y se pueden prevenir estos procesos». De echo esta entidad es una de las encargadas de ofrecer a agencias colaboradoras y propietarios informes sobre el historial de morosidad de un inquilino y si se dispone de ingresos estables para afrontar las rentas.