La provincia registra la menor caída del paro anual de la región

La provincia mantiene la racha. El paro sigue a la baja y alcanza el mejor total de la década. De hecho, para encontrar un mes de abril con menor cifra de desempleados habría que remontarse a 2008. No obstante, subyace tras la estadística reciente cierto estancamiento, especialmente al comparar su evolución anual con la de otras zonas próximas, así como con la regional y nacional.

En concreto, Burgos cerraba abril con 600 parados menos que el mes pasado, hasta un total de 18.384, y 876 por debajo del dato de hace un año. Ambas cifras suponen descensos del 3,16% y del 4,55%, respectivamente. Siendo notable, este último es el menor de toda la región y se ubica más de dos puntos por debajo de la media de Castilla y León, que en términos anuales registra un descenso del desempleo del 6,76%, y 0,6 menos que el promedio del conjunto de país, que en el mismo periodo reducía tal indicador un 5,17%.

Distinto panorama arroja un análisis más cortoplacista de los datos. La evolución mensual aúpa a la provincia al segundo puesto autonómico de las áreas en las que más ha bajado el paro en los últimos treinta días. Solo Soria, con un 4,18%, supera el descenso local del 3,16% que en esta ocasión mejora tanto la media regional, 2,47%, y la nacional, 2,81%.

Por otra parte, en términos absolutos, cabe destacar no obstante que el descenso en 600 personas del número de parados en un mes, aunque notable, es el menor desde 2015. En aquel año, por ejemplo, la rebaja llegó a 1.600 y rondó el millar en los años sucesivos. Ya el año pasado se aproximaba a la actual que, eso sí, deriva en una cifra total que como se ha mencionado es la más reducida desde 2009.

La influencia de la Semana Santa es determinante en la estadística de esta época del año. Marzo o abril, según ejercicios, acusan un periodo festivo que, a su vez está marcado por la meteorología. Con todo, florecen para la ocasión contratos de refuerzo en un sector clave, el de servicios, que en el caso concreto de la provincia aglutina casi en exclusiva el movimiento laboral mensual con 589 parados menos que en marzo, hasta los 12.285.

En el mismo plazo, apenas varía el saldo total de desempleados en la agricultura, la industria y la construcción. Los dos primeros casos ganan 24 y 29 parados en un mes, con totales de 1.074 y 2.471, respectivamente, mientras que el tercero pierde 25 y suma 1.288.

Respecto a abril de 2018 los movimientos son más dispares. Si bien servicios es también el que más personas ‘rescata’ en términos absolutos, con 465 menos ahora que hace un año; destaca la caída porcentual en la construcción, donde el paro, con 278 desempleados menos, se reduce más de un 17%.

En cuanto a la distribución por género, cabe reseñar que -posiblemente por concentrarse en el sector servicios, tradicionalmente más ‘femenino’- el descenso mensual del paro registrado en abril es más acusado entre las mujeres: 411 de las 600 personas menos en espera de un puesto. Lo mismo ocurre en la evolución anual. De los 876 desempleados ‘perdidos’ desde abril de 2018, 506 eran mujeres. Así pues, aunque de manera leve, la brecha en cuestión parece mitigarse.

CONTRATOS

La estadística de contratos formalizados el mes pasado en la provincia, elaborada por el Servicio Regional de Empleo (Ecyl), señala que se rubricaron en ese periodo hasta un total de 10.711, 790 más que en marzo pero 229 menos que hace un año, lo que confirma la ralentización de la mejoría. Por sectores y género ofrece también idéntica foto fija del mercado laboral: los servicios ‘mandan’ y, quizá por esa razón, ellas ganan terreno.