Más presencia policial en las fiestas en zonas de afluencia nocturna

La Junta Local de Seguridad desmenuzaba ayer el dispositivo que velará por que las fiestas de San Pedro y San Pablo transcurran en paz. Para lograrlo, «habrá más efectivos en zonas de especial afluencia nocturna», según detallaba el alcalde, Daniel de la Rosa, tras la reunión de rigor, a la que acuden representantes de los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado así como los servicios municipales de Policía Local y Protección Civil.

En concreto, se reforzará la seguridad en el paseo Sierra de Atapuerca, donde las aglomeraciones se repiten noche tras noche, bien por los fuegos artificiales, bien por los conciertos programados, bien por la asistencia masiva de jóvenes a la orilla del río. En este punto, según añadía la nueva concejal de Seguridad Ciudadana, Blanca Carpintero, se baraja aún la posibilidad, además, de colocar más contenedores e incluso «urinarios portátiles» para que no haya excusa para mantener limpia la zona.

También aumentará la supervisión en la plaza del Rey San Fernando y en la vecina calle de La Paloma. «Existe especial interés en despejar esta vía de obstáculos pues en caso de emergencia la evacuación tendría que ser ágil», señalaba Carpintero, para incidir que en ambos casos el dispositivo «será de carácter preventivo».

Otros puntos en los que se concentrarán los esfuerzos serán las plazas que acogerán verbenas. En estos casos se empleará seguridad privada. Se contratarán a tal efecto hasta 1.020 horas de vigilancia a repartir entre San Agustín, San Juan y Virgen del Manzano, precisaba la edil, para recordar que también habrá ambulancias presentes siempre que haya acumulaciones de ciudadanos. «Los bomberos, por su parte, salvo ocasiones muy excepcionales, actuarán a demanda», añadía Carpintero y recordaba que el recinto ferial tiene su propio plan de emergencias.

Preguntado por el aspecto con el que amanecía el Parral el día después de la celebración del Curpillos, convertido en el ya tradicional mar de plásticos y basuras, el alcalde de la ciudad quiso subrayar como positivo el volumen de residuos recogido. Y es que este era inferior al de años anteriores «pese a registrarse una mayor participación debido al buen tiempo que acompañó toda la jornada». «También hubo menos asistencias de carácter sanitario y apenas restos de vidrio, al impedirse la entrada de este material, lo que en definitiva deja una mejor estadística», destacaba De la Rosa.