La pequeña empresa copa las nóminas del Fogasa

La peor cara de la crisis es trabajar sin cobrar. La falta de liquidez, impagos de contratos, falta de trabajo y la actividad bajo mínimos de algunos sectores llevó a muchas empresas a concurso de acreedores y a impagos. La peor de las situaciones en el mercado laboral aboca a muchas empresas y trabajadores a acudir al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa). Una herramienta que ha bajado en número de beneficiarios, pero sube en las empresas implicadas. Como con los Expedientes de Regulación de Empleo es la pequeña empresa la que se ve abocada a esta difícil situación después de haber aguantado el tirón inicial. Son las consecuencias de una las crisis económicas que más se han prolongado en el tiempo.

Las cifras del Fogasa en la provincia de Burgos refleja que la entidad ha abonado salarios e indemnizaciones a 160 trabajadores y trabajadoras de la provincia hasta el mes de septiembre. Son un 27% menos que hace un año cuando, en el mismo periodo, se habían abonado los pagos de salarios e indemnizaciones para 220 trabajadores. Pero, al mismo tiempo, el número de empresas abocadas a este proceso se ha incrementado.

De esta manera, entre enero y septiembre se han visto en este proceso un total de 74 empresas y, en el mismo periodo del año pasado, había un total de 66 y en un año se han incrementado en un 12%. Son tan solo ocho empresas más, pero supone seguir bajando la media de trabajadores por empresa. Así, la media de empleados por compañía era más de tres trabajadores por cada negocio mientras que, ahora, se sitúa en pymes de tan solo dos trabajadores.

El rostro de los beneficiarios por el pago del Fogasa es femenino. Hay más pagos realizados a mujeres que hombres: 71 chicos frente a las 88 mujeres que han sido beneficiarios de esta prestación. En el caso de ellas los pagos son más bajos. Ellas perciben una media de 6.195 euros mientras que ellos perciben 7.041 euros de media. En pagos el Fogasa ha ingresado 1,05 millones de euros divididos en 386.486 euros en salarios y 664.457 euros en indemnizaciones. Los datos reflejan un descenso del dinero desembolsado de 566.475 euros ya que en el mismo periodo del año pasado se abonaron un total de 1,6 millones de euros de pagos del Fogasa a asalariados burgaleses repartidos en 541-669 euros en por salarios adeudados y 1,07 millones en indemnizaciones.

La mayor parte de los ingresos a través del Fogasa llegan tras por la vía de la ejecución. De esta manera por esta vía se han abonado un total de 360.385 euros y en Salarios la vía ejecutiva se ha determinado el pago en 569.537 euros. El pago por procedimientos ha sido de 26.100 en salarios y 94.919 en indemnizaciones. En Burgos no se ha registrado ninguna indemnización por causa de responsabilidad.

Los pagos del Fogasa tienen límite y, en casos con una relación laboral prolongada, pueden estar por debajo de los derechos adquiridos. Los límites en lo que se refiere a los salarios vienen dados por el Salario Mínimo Interprofesional (SMI). En concreto se abona el doble con un máximo de 120 días. En cuanto a las indemnizaciones se establece también un límite con una media vinculada al doble del SMI con un limite en función del tipo de despido. Si ha sido improcedente asciende a 30 días por año trabajado, si es objetivo a 20 y si es un contrato temporal va de 12 a ocho días en función de cuándo se firmó ese contrato. El importe total de la indemnización se situará en torno a los 20.800 euros.