«Incertidumbre» en las piscinas municipales

Los ayuntamientos del medio rural se enfrentan a una «nueva incertidumbre» de cara al verano. Por el momento, desconocen cuándo podrán abrir las piscinas municipales porque los servicios territoriales de Sanidad aún no han fijado fechas concretas para llevar a cabo las pertinentes inspecciones. En base a esta situación, la secretaria general del PSOE en Burgos, Esther Peña, exigió ayer a la Junta de Castilla y León que se «ponga en marcha de manera inmediata», máxime cuando por estas fechas se suelen acometer esta clase de revisiones para verificar si las instalaciones cumplen con la normativa vigente. Según Peña, multitud de municipios de menos de 20.000 habitantes han trasladado su «preocupación» al respecto ante la «posible avalancha de visitantes» durante el periodo estival. Por este motivo, el grupo parlamentario socialista solicita «agilidad» al Gobierno autonómico en lo que a protocolos sanitarios se refiere, pues hasta ahora los ayuntamientos «solo han recibido una guía», el pasado mes de mayo, con medidas preventivas para evitar contagios. Y es que a pesar de que el Covid-19 haya «condicionado el calendario habitual», la Junta debe paliar cuanto antes la «falta de información clara y precisa» en relación a la operatividad de las piscinas para que su reapertura se pueda llevar a cabo «en las próximas semanas». En este sentido, la también diputada en la Cámara Baja recordó que el Ejecutivo autonómico tiene «la última palabra» en esta materia, por lo que no cabe que se escude en las directrices impuestas por las autoridades sanitarias estatales. Consultorios localesLa alegría es relativa en el seno del grupo parlamentario socialista tras el acuerdo alcanzado en las Cortes para la reapertura de los consultorios ubicados en el medio rural. Una «magnífica noticia» para el procurador Jesús Puente, avalada finalmente por Ciudadanos tras mantener una «postura recalcitrante de no atender a ninguna de nuestras demandas», pero al mismo tiempo una advertencia sobre la postura «vigilante» que adoptará el PSOE para evitar la «amortización de plazas» en los municipios de menos de 20.000 habitantes. En la misma línea, Peña celebró que después de «millones de excusas y falacias», el equipo de Gobierno regional haya respaldado la propuesta de los socialistas. No en vano, consideró que «a río revuelto, ganancia de pescadores». Dicho de otra forma, subrayó la necesidad de «aprovechar sus debilidades» tras la negativa de ‘populares’ y naranjas a la misma propuesta en el último pleno de la Diputación. Así las cosas, la secretaria general del PSOE burgalés dejó claro que su grupo tratará de impedir que se consolide el Plan de Aliste, que abre la puerta a una reestructuración del modelo asistencial que «pretende acabar con 600 consultorios locales en nuestra provincia». En este sentido, valoró de forma muy positiva el trabajo desempeñado por muchos ayuntamientos, «en primera línea», oponiéndose al cierre de ambulatorios.