SUCESOS
«Se ha bajado del coche y se han liado a tiros»
Un charco de sangre y tres agujeros en el túnel de lavado, los únicos restos visibles del tiroteo en Villagonzalo en el que ha muerto un policía / Los empleados del turno de noche «al principio no sabían lo que estaba pasando»
Restos de un charco de sangre del policía abatido en la gasolinera de Villagonzalo tras proceder a su limpieza. D. S. M.
Los grupos de WhatsApp de Villangonzalo Pedernales no dejan de comentar la noticia. La muerte de O.A.P.C. (46 años), policía nacional de baja psicológica desde este martes, ha causado estupor en el municipio. Más aún tras confirmarse que se vio involucrado en un tiroteo con la propia Policía Nacional y la Guardia Civil tras una persecución que culminó en la gasolinera ubicada a la entrada del pueblo, junto al hotel Rey Arturo.
Nada parecía indicar esta mañana lo sucedido de madrugada en la estación de servicio. Nada salvo los restos de un charco de sangre, con alguna que otra gota visible tras proceder a su limpieza, en el acceso desde la A-62 en dirección a Burgos. Además, se pueden apreciar tres agujeros, que encajarían con disparos de bala, en el túnel de autolavado que se encuentra junto a los surtidores.
Según detalla un empleado de la gasolinera a este periódico, los compañeros del turno de noche le han comentado que varias patrullas estaban esperando a O.A.P.C. tras una persecución en la BU-30 después de saltarse un control. De acuerdo al relato de este trabajador, nada más estacionar en el área de servicio «se ha bajado del coche y se han liado a tiros».
El suceso ha pasado desapercibido en Villagonzalo. Un vecino de la calle Pico San Millán, la más cercana a la gasolinera, se enteraba del tiroteo por este periódico. Totalmente sorprendido, confirmaba que no ha escuchado nada pese a la cercanía de su vivienda con el lugar de los hechos.
Lo mismo en el Rey Arturo. Tanto los empleados como los clientes amanecían esta mañana con la noticia. Nadie oyó nada y «no se oían sirenas», aseguran desde el hotel. La muerte de este policía investigado por Asuntos Internos les ha pillado «de rebote» y, según el testimonio de una trabajadora, los encargados del turno de noche en la gasolinera «al principio no sabían lo que estaba pasando».
Según informa La Voz de Galicia, el agente abatido estaba suspendido de empleo y sueldo tras ser detenido el pasado mes de marzo en una operación de la Policía Nacional contra el tráfico de cocaína rosa en Ferrol.