Cae la banda criminal que saqueó dos naves en el polígono de La Varga

La Guardia Civil ha detenido a dos personas e investigado a otras seis, con edades comprendidas entre los 30 y los 40 años, como presuntos autores en distinto grado de participación de ocho delitos de robo con fuerza y de un delito de pertenencia a grupo criminal.

Entre septiembre y diciembre de 2022, se perpetraron catorce robos de características similares, con el empleo de la fuerza, en negocios ubicados en naves industriales de dos polígonos ubicados en el Alto de la Varga, al sur de la capital.

Los hechos, que tuvieron cierta repercusión mediática, crearon un gran malestar entre los empresarios allí emplazados y también alarma social, dado el sumatorio de ilícitos, de manera sistemática y con aparente impunidad.

La Guardia Civil iniciaba entonces una investigación bautizada como Operación ALNEUVI, que inicialmente permitió aunar ocho de estos asaltos en base a sus características comunes, con una valoración total del material sustraído cercana a los 30.000 euros.

Modus operandi

Con el empleo de la fuerza, fracturaban el bombín de la puerta principal haciendo palanca con alguna herramienta. Llamó la atención el horario de comisión, a plena luz de día, aprovechando que los empleados hacían parada para la comida asegurándose que no había nadie dentro.

Se apoderaban de material con alto valor económico y fácil introducción en el mercado negro (neumáticos, material de construcción y sonido), mercancía que ya tenían localizada previamente.

Perfectamente coordinados, utilizaban un turismo como lanzadera y apoyo, y una furgoneta para el transporte del botín, aunque las pesquisas llevadas a cabo han aclarado que empleaban también otros dos vehículos similares y placas de matrículas falsas para dificultar su seguimiento.

Sus integrantes formaban parte de un grupo criminal perfectamente organizado y especializado, muy hermético, extremadamente activo y dotado de gran movilidad geográfica, con un claro reparto de roles y tareas.

Detenciones

Las indagaciones, entrevistas y el análisis de la información recabada por el Cuerpo permitieron identificar a los integrantes del grupo, alguno con amplio historial delictivo, cuya base de operaciones se centraba en la Comunidad de Madrid, desde donde partían hasta los lugares que más tarde asaltaban, recorriendo largas distancias.

Las detenciones y la investigación  se han llevado a cabo en diferentes fases, todas en localidades de la Comunidad madrileña y una en el centro penitenciario de Burgos, donde permanecía ingresado uno de ellos por otras causas.

La investigación ha corrido a cargo de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Burgos, que ha instruido diligencias presentadas en la sede de los Juzgados de esta ciudad.