El Correo de Burgos

Herrero Temiño renovará los contenedores soterrados de Burgos por 1,2 millones de euros

Urbanismo planteará a la empresa empezar la obra por la plaza Vega. Este proyecto cuenta con 400.000 euros asignados de los fondos europeos Next Generation

El vallado, los contenedores soterrados y una señal turística dificultan el paso de los viandantes por la estrechez del espacio que queda libre.

El vallado, los contenedores soterrados y una señal turística dificultan el paso de los viandantes por la estrechez del espacio que queda libre.ÓSCAR CORCUERA

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El proyecto de renovación de los contenedores soterrados de Burgos da un paso más con la firma de la propuesta de adjudicación. Desde el área de Urbanismo del Ayuntamiento de Burgos, se plantea que la única empresa que se ha presentado a la licitación de esta obra pública se haga cargo de las actuaciones: Herrero Temiño, tras la valoración realizada por la mesa de contratación.

La adjudicación se produciría por un precio de 1.203.747,06 euros, con el IVA incluido, que supone un porcentaje de baja del 10,7% sobre el precio de inicio, que era de 1.349.038,51 euros. 

El plazo de ejecución de las obras asignadas a este proyecto, que conlleva la clausura de varios buzones y la creación de nuevas islas ecológicas, es de seis meses desde la firma del contrato, cuestión que se producirá en las próximas semanas. En este tiempo, la empresa deberá presentar el plan de seguridad y salud, un trámite previo al inicio de las actuaciones, que podrían verse sobre el terreno a partir del mes de marzo.

Esta actuación tiene asociados 400.000 euros de fondos europeos que permitirán financiar en parte el proyecto. Desde el Ayuntamiento de Burgos ya se ha solicitado una prórroga al ministerio correspondiente para ampliar el plazo de ejecución hasta el 31 de diciembre de 2024 con la idea de no perder esta financiación europea.

El concejal de Urbanismo, Manuel Manso (PP), explicaba que el equipo de Gobierno trasladará a la empresa el interés porque se actúe de manera prioritaria en la plaza Vega, donde está previsto eliminar un buzón que lleva inutilizados varios años. La obra permitiría devolver unos metros de paso a los peatones en una acera muy estrecha a causa del espacio que ocupan estos contenedores, así como el vallado provisional de una obra de construcción de viviendas, parada también desde hace varios años.

El proyecto contempla eliminar ocho islas y se van a desplazar otras tres para adaptarlas a la normativa actual para ganar en seguridad tanto para los usuarios como para los operarios que tienen que recoger los residuos. Otras cinco se renuevan y amplían para acoger las cinco fracciones de desechos y se crea una nueva en la avenida del Cid.

Entre las islas que se eliminan están las de la plaza del Cid, plaza Vega, así como Sombrerería y calle San Juan y Cordón, todos ellos por su falta de funcionalidad en la actualidad. También se quitará el de la plaza del Rey San Fernando, para mejorar la estética del entorno de la Catedral, los de plaza Mayor (sureste) y los de la plaza de los Castaños.

En cuanto a los que se modifican para unificar en una las dos islas que existen en la actualidad están los de la calle Laín Calvo, que acogerá los contenedores de orgánico, resto, papel, vidrio y envases. 

Y se van a desplazar los de la calle San Esteban, hasta una localización más cómoda para el acceso de los camiones, así como el de la plaza Alonso Martínez, que estará junto a la estatua de la mujer del paraguas.

También la del paseo de la Audiencia se unificará en la calle Eduardo Martínez del Campo con una isla con todos los contenedores. En la calle Nuño Rasura se va a sustituir el buzón de vidrio por uno de papel y se pondrá uno nuevo para vidrio. Por último, en la avenida del Cid se ubicará una isla nueva.

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