Burgos suma 14.200 activos pero los ocupados sólo crecen un 0,24%

La Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre del año registra un incremento de población, especialmente en edad de trabajar, pero no se traduce en personas ocupadas de la misma manera. Unas cifras de clarooscuros con las que Burgos arranca el año con una de las tasas de paro más bajas del país y de la provincia.

Los datos de la EPA reflejan que Burgos es la provincia de con la segunda tasa de paro más baja de Castilla y León y la octava del país. De esta manera, el primer trimestre deja una cifra de tasa de paro del 7,20 cifra inferior a la registrada en Segovia (6,86) pero superior a la registrada por Valladolid (7,42) y Palencia (7,45) pero muy lejos de la alcanzada en Zamora (14,38) que es la que registra peor dato en la región.

Para el secretario general de UGT en Burgos, Pablo Dionisio Fraile, la cifra de la tasa no esconde la realidad. «No tenemos una de las mejores tasas de paro no, detrás hay cerca de 15.000 personas en desempleo en la provincia y eso es gravísimo, porque después de los números están las personas», señaló.

Los datos globales de la última EPA reflejan que 14.500 burgaleses están en paro de ellos 6.900 son hombres y 7.500 mujeres. La cifra ha subido en 100 personas respecto al mes de diciembre pero son 500´ desempleados más que hace un año. Es decir, la variación interanual cotiza al alza en lo que a parados se refiere con un 3,5% más. La comparativa intermensual viene dada por el incremento del paro femenino mientras que la interanual está auspiciada por el desempleo masculino. Ellas son 900 paradas más que en diciembre pero 600 menos que en el primer trimestre de año pasado. En los trabajadores varones la cifra ha bajado en 900 personas respecto a hace tres meses mientras que ha subido en mil respecto a marzo de 2o23.

Formación para generar ocupación

Para los sindicatos la situación de falta de mano de obra no es posible con esta cifra de burgaleses en paro. «Los empresarios hablan de que en sus sectores no encuentran trabajadores pero lo que la ciudadanía reclaman es que a los trabajadores en paro se les forme para tener capacidad de ocupar esos puestos que se están demandando», insistió Fraile.

La cifra de ocupados ha crecido pero no tanto como la de nuevos activos registra en el mismo periodo la estadística. Así, la población activa en la provincia de Burgos se ha situado en marzo de este año en 175.400 personas. Esta cifra supone un 14.200 personas más que hace un año cuando la cifra de ocupados fue de 161.200 personas. En cuanto al mes de diciembre se ha ganado 600 activos más. Por contra, la cifra de ocupados se mantiene estable. La última actualización de la EPA deja 161.200 personas que son 100 más en tres meses y 400 más, es decir, un 0,24% más que hace un año. El primer trimestre de 2023 Burgos registró 160.800 ocupados.

Lo que sí se ha disparado son aquellas personas que acceden a su primer empleo o que llevan más de dos años en el paro. En hombres no hay y en mujeres quedan 100 personas en esta situación. La cifra ha bajado en 700 personas respecto al trimestre anterior porque los 100 hombres que buscaban su primer empleo se ha quedado a cero y de las 700 mujeres en paro y en búsqueda activa de su primer empleo se ha pasado de 700 personas a 100.

A este respecto, el secretario provincial de CCOO en Burgos, Juan Núñez, pone el foco en el periodo de prueba. «Hay una parte importante del tejido empresarial que aprovecha el periodo de prueba de los trabajadores para, en ese momento, prescindir de ellos sin ninguna justificación, sin presentar despido ni indemnización algo que se va a convertir en el objetivo de una campaña de inspección de trabajo». Señaló que el dato de paro muy bajo pero el mantenimiento de la demanda de apoyo social, en algunos casos cronificado como ha quedado demostrado en las Ayudas de Urgencia Social del Ayuntamiento de Burgos, tiene mucho que ver con la pérdida de poder adquisitivo. «La negociación colectiva ha incrementado algo pero no es lo nos hubiera gustado y hay que seguir negociando hasta donde sea necesario y si hay que llegar al conflicto se sale a la calle por un trabajo digno», remarcó Juan Núñez.

En la EPA se evidencia, también, la pérdida de población en edad de trabajar. La estadística refleja la población mayor de 16 años, edad en la que se puede acceder a un puesto de trabajo. En Burgos se ha situado en 306.900 personas lo que suponen 500 personas más en tres meses y un millar más en seis que son personas en edad de trabajar. La cifra refleja que Burgos es una provincia feminizada: hay 155.200 mujeres, mil más que hace un año y 900 más que al cierre del año pasado. En la población mayor de 16 años hay 151.700 personas radicadas en Burgos, 600 menos que en diciembre y regresa a los mismos números que hace un año.

Inactivos 

En cuanto a las personas que no pueden trabajar, la cifra también crece. En 100 personas en un año hasta alcanzar a 131.200 inactivos de los que la situación de inactividad mayoritaria es la de jubilación. Son 80.800 en el primer trimestre de 2024 que son un 2,6% más que hace un año cuando se registraban 78.700 pensionistas.

La segunda causa de inactividad en la provincia de Burgos es del perfil de estudiantes. La población activa empieza a contar a partir de los 16 años y muchos alargan su vida estudiantil hasta pasados los 20. Con todo, es una cifra que baja. De los 23.800 registrados en el primer trimestre de 2023 se ha pasado a los 22.300 registrados hasta marzo de 2024.

Otra razón de inactividad puede ser el de adultos que se dedican a trabajar en el hogar que no es remunerado. Son un total de 21.400 personas. La cifra también baja en un año un 5%. La incapacidad permanente, en cambio, sube en el mismo periodo. Se pasa de los 3.600 del primer trimestre de 2023 a los 4.900 que han sumado hasta marzo de este año.