El PSOE denuncia por acoso a los promotores de la concentración diaria frente a su sede

El PSOE ha dicho basta. Cansados ya de la deriva que han tomado las concentraciones diarias a la puerta de su sede, en el número 105 de la calle Vitoria, ha decidido trasladar a la Policía Nacional las «reiteradas amenazas e intimidaciones» que los, pocos, manifestantes que aún acuden a la cita profieren, según relatan los socialistas en su denuncia, «a la plantilla, los afiliados y los cargos políticos» que acuden a las instalaciones de la llamada Casa del Pueblo.

Asegura el secretario general del PSOE en Burgos, Daniel de la Rosa, que «si bien reconocemos el derecho a la libertad de expresión, existen límites que no se deben cruzar y uno muy claro es menoscabar los derechos al trabajo y a ejercer la política sin ver amenazada nuestra integridad». 

A tal situación, afirma, se enfrentan cada jornada, en particular los días que no acuden efectivos de la Policía Nacional para controlar la concentración. «Entonces cruzan la calle y se quedan en la misma puerta, amedrentando a todo aquel que sale o llega a la sede, incluso puntualmente se llegan a dar graves ataques verbales», lamenta, para recordar que en esas dependencias mantienen reuniones de militantes o encuentros con representantes de la sociedad burgalesa en el momento en la que tiene lugar la manifestación, de 20 a 21 horas.

Asevera De la Rosa que le consta que también varios vecinos de la misma comunidad de propietarios del número 105 de la calle Vitoria han presentado denuncias, molestos por el incesante ruido que genera una protesta que siempre se acompaña de megafonía «por la que se profieren insultos y comentarios» que causan perjuicio, pues, además de dificultar el descanso, «se trata de familias con niños, algunos muy pequeños, que no tienen por qué escuchar cada día determinadas cosas», añade el exalcalde y actual portavoz de la oposición municipal.

No queda ahí la denuncia socialista, pues se refiere además en particular a estas molestias y al daño que los asistentes a la concentración generan en los árboles de la zona, que agujerean para colocar sus pancartas.

Así, además de poner en conocimiento de la Policía Nacional de estas situaciones, hoy mismo, el PSOE ha registrado hoy mismo una copia del documento acompañado de una instancia dirigida a los servicios municipales competentes. En concreto, exigen a la Policía Local, Medio Ambiente y Sanidad, que tomen cartas en el asunto.

El secretario de Organización de los socialistas burgaleses, Josué Temiño, ha detallado que estas prácticas incumplen claramente la ordenanza de arbolado y muy probablemente la de ruidos, extremo que deberá comprobarse a instancias del Ayuntamiento.

«Recordamos a la alcaldesa, Cristina Ayala, que gobierna para todos, por lo que debe poner remedio a esta situación», indica el también edil, que ha sufrido en sus carnes la «incomodidad e inseguridad» que se genera cada tarde a las puertas de la sede socialista.

En concreto, Temiño ha explicado que la ordenanza de zonas verdes, aprobada en el anterior mandato, castiga expresamente -en su artículo 5.3- el daño a los árboles fácilmente visible, pues varios ejemplares muestran las hendiduras que les convierten en soporte ocasional. Se contemplan sanciones de entre 750 y 1.500 euros para estas actuaciones. 

Lo mismo ocurre con el uso de altavoces, que, más allá de exceder el volumen permitido, a juicio del PSOE, vulnera directamente el artículo 19 de la ordenanza que regula este ámbito, en el que se establece que «no se permitirán sistemas de megafonía, emisiones musicales o vocalistas que utilicen equipos de reproducción, ampliación sonora o elementos de percusión, salvo en los casos autorizados por el Ayuntamiento». Algo que, apostilló, no sucede.

La denuncia en cuestión se ha interpuesto contra la entidad convocante de la cita y responsable de su comunicación a la Subdelegación del Gobierno, denominada Plataforma Cívica Patriótica.