El fuego en contenedores, viviendas y fábricas copa la mitad de las salidas por incendio de los Bomberos de Burgos
Las falsas alarmas se disparan un 166%, aunque son prácticamente testimoniales. Con cuatro plazas pendientes de cubrir, se dará prioridad a las promociones internas

Intervención de los bomberos en el punto limpio de Burgos.
Al jefe del Cuerpo de Bomberos de Burgos, Miguel Ángel Extremo, le preocupa sobremanera que la ciudad registre una media de 11 contenedores ardiendo cada mes. El año pasado se llevaron a cabo 131 salidas por este motivo, una más respecto a 2023, y cualquier persona con dos dedos de frente sabe lo «perjudicial y peligroso» que resulta. Por no hablar del gasto añadido para las arcas públicas.
Es curioso, cuanto menos, que la cifra de contenedores en llamas sea idéntica a la suma de incendios en viviendas (111) e industrias (20) a lo largo del ejercicio anterior. Sobre las intervenciones en domicilios afectados por fuego o humo, se produjo un descenso del 5%. Por desgracia, hubo que lamentar el fallecimiento de cuatro personas.
Si hablamos de siniestros en fábricas, se constata un incremento del 25%. En cualquier caso, Extremo asegura que «las industrias en Burgos son seguras». De hecho, se trabaja «codo con codo» con ellas «desde el primer momento», bien sea realizando fichas de intervención, cursos formativos o revisando previamente sus proyectos de reforma. En la misma línea, el suboficial del Cuerpo, Luis Mata, reconoce que los bomberos están «satisfechos con su actitud» para evitar que se produzcan incendios dentro de sus instalaciones.
Tal y como se aprecia en la Memoria del Cuerpo de Bomberos correspondiente a 2024, los siniestros en contenedores, viviendas e industrias coparon la mitad de las 524 salidas contabilizadas por incendio. Aparte, también se efectuaron actuaciones relacionadas con vegetación (113), vehículos (41), objetos aislados (8), vertederos (6) o quemas controladas (28). En términos generales, no se detectan aumentos o descensos significativos de un año a otro.
Donde sí se nota una subida considerable es en el número de avisos atendidos por la sala de comunicaciones de los Bomberos: 4.941 en total, 577 más que el año anterior. De estas llamadas, se efectuaron 2.442 intervenciones. Al margen de que fuesen un 12% que en 2023, cabe reseñar que se trata del ejercicio con mayor volumen de actividad, únicamente por detrás de 2020, en el histórico del Cuerpo que recoge datos desde 1987.
El mayor repunte en términos porcentuales, a pesar de ser una práctica testimonial que representa el 0,68% del cómputo global de actuaciones, se sitúa en las falsas alarmas. 16 en 2024 frente a las seis del ejercicio anterior. O lo que es lo mismo: un 166% más. No en vano, Extremo puntualiza que «por suerte no son tantas». Y si se producen de manera reiterada y maliciosa, se informa a la Policía Local para que investigue a sus autores e interponga la pertinente sanción administrativa.
Dentro del apartado de salvamentos, los bomberos fueron requeridos en 65 accidentes de tráfico, una docena más que el año previo y con un mayor número de víctimas mortales: 10 frente a seis. También se efectuaron 300 rescates a personas en el interior de sus domicilios, 13 de las cuales habían fallecido previamente. Sumando además las 37 intervenciones con animales, el total asciende a 402.
Como siempre, las asistencias técnicas ocupan buena parte de la actividad del Cuerpo. De las 1.303 salidas por diferentes causas el año pasado, la mayoría estuvieron relacionadas con la retirada de enjambres (222), achiques de agua y fugas (206), saneamiento de fachadas (183), limpieza de ramas (148) y riesgos de la naturaleza (136). Por otro lado, las actuaciones de carácter preventivo aumentaron de 128 a 196. Sin contar, eso sí, las 334 prácticas programadas a lo largo del año.
Dotación de medios
Sobre el papel, la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) del Cuerpo contempla 125 plazas. También sobre el papel, habría 36 vacantes aunque en la Memoria se especifica la incorporación de 13 bomberos de nuevo ingreso tras culminar su periodo de formación.

La alcaldesa, Cristina Ayala, saluda a los 13 nuevos efectivos del Cuerpo de Bomberos de Burgos.
«A 125 no vamos a llegar nunca, se sobredimensionó para que pudiéramos convocar», advierte Extremo mientras explica que se intentará lanzar una nueva convocatoria «lo antes posible» para cubrir tres vacantes del último proceso selectivo y otra plaza libre por jubilación. Además, considera prioritaria mover ficha en materia de promociones internas.
Respecto a los medios materiales, el jefe de Bomberos agradece que el Ayuntamiento haya realizado una «inversión cuantiosa», incluso «por encima del 60%», desde 2016. De cara a este año, se prevé incorporar un nuevo furgón y ya se trabaja en la redacción de los pliegos para adquirir un camión de rescate. De esta forma, se completará la flota.
«Cuerpo de élite»
Para el concejal de Seguridad Ciudadana, Ángel Manzanedo, el «esfuerzo, dedicación y profesionalidad» de los bomberos está fuera de toda duda. No solo por la «diversidad y complejidad de las intervenciones», sino también por su capacidad de «coordinación con otras administraciones». Se trata, por todo ello, de un «cuerpo de élite» cuyo principal objetivo sigue siendo «reducir los tiempos de respuesta».
Sobre la renovación del convenio entre el Ayuntamiento y la Diputación para la prestación de servicios en el medio rural, aún falta la firma de la Institución Provincial después de que el Consistorio estampase su rúbrica en el pleno municipal del pasado mes de diciembre. Según Manzanedo, lo más probable es que el acuerdo se cierre definitivamente «este mes».
A expensas de que se renueve dicho convenio, la Memoria de los Bomberos detalla que el año pasado se coordinaron 1.674 avisos de emergencia gestionados por los voluntarios de los 19 parques desplegados en la provincia y por los efectivos de Aranda de Duero y Miranda de Ebro. Entretanto, el Cuerpo capitalino llevó a cabo 212 salidas fuera del término municipal.