FAE y Cajaviva premian la «fortaleza» de Bigmat Fontecha y el Lagar de Isilla
Los Premios Pymes y Autónomos reconocen la labor de ambas empresas

Entrega de los premios FAE Cajaviva a Pymes y Autónomos.
Bigmat Fontecha celebra este año su 50 aniversario y El Lagar de Isilla ya suma más de 30 años de experiencia empresarial. Dos buenos ejemplos de «fortaleza» emprendedora, del músculo de las pequeñas y medianas empresas que mueven la economía burgalesa.
Por ello, la Confederación de Asociaciones Empresariales (FAE) de Burgos y Cajaviva Caja Rural reconocen esta trayectoria con la entrega de los premios Pyme y Autónomos, en la categoría de trayectoria pyme y empresario individual.
El Fórum acogió el acto de entrega de este reconocimiento a dos empresas que son «un orgullo para la provincia de Burgos», según el presidente de FAE, Miguel Ángel Benavente. Pequeñas empresas para las que «nunca sopla a favor», con unas administraciones que legislan «como si fuésemos multinacionales», por lo que reclamó al Gobierno que reduzca «su política persecutoria y las medidas de control, supervisión y sanción». Benavente incidió en la necesidad de eliminar trabas burocráticas que restan competitividad.
En ese contexto, destacó el trabajo que realizan empresas como las premiadas. En ambos casos, Benavente alabó su «fortaleza», su «espíritu de patria pequeña» y les animó a que siguieran en la misma línea.
El presidente de la Fundación Caja Rural, Tomás Fisac, reconoció «los esfuerzos» de ambos proyectos, y «nos identificamos con su pasión», por lo que reiteró el compromiso de la entidad con las pequeñas y los autónomos que, recordó, representan el 99% del tejido empresarial, «y eso hay que tenerlo en valor» porque «son creadores de riqueza, sabemos que crean empleo».
Consuelo Fontecha, gerente de Bigmat Fontecha, se mostraba emocionada y agradecida por el reconocimiento, que llega en el año del 50 aniversario de la empresa dedicada al comercio y distribución de materiales de construcción.
Y orgullosa también porque «exista el día de los premios a las pymes», algo así, comparó la también presidenta de la Federación de Empresarios de Comercio (FEC) de Burgos, como los Goya, «luego ya están los Oscar, que es el FAE de Oro», galardón que también le gustaría tener algún día. Recuerda que 50 años dan para mucho, con «muchísimas etapas, imprevistos, problemas». 32 años después de adquirir el negocio familiar junto a su hermano Santos, destacó que «hemos trabajado incansablemente para mantenerlo en primera línea de nuestro sector, siendo un referente para nuestros clientes y ofreciendo siempre el mejor servicio».
Espera que en el futuro más próximo «podamos seguir trabajando, que podamos seguir generando empleo, que podamos seguir generando riqueza». Reclamó que las administraciones «de alguna manera, se pongan del lado de las empresas y no enfrente de las empresas».
José Andrés Zapatero Plaza, CEO del restaurante El Lagar de Isilla, de Aranda de Duero, acumula 45 años de experiencia profesional, tras dar sus primeros pasos en el negocio de sus padres y abrir, en el año 1994, El Lagar de Isilla.
Destacó que el «trabajo en equipo» es clave para una empresa familiar, en la que están involucrados sus tres hijos, que empezó con su mujer y un empleado y hoy son 84 trabajadores, cuya «base es el territorio, y soy un firme defensor de su valor». Zapatero quiso reivindicar la necesidad de invertir en infraestructuras para el medio rural.