El gran concurso del Hormigón
Cachis de hormigón para generar vocaciones en la construcción
El Colegio Oficial de Arquitectos Técnicos y la UBU organizan este concurso para alumnos de 1º de Bachillerato Tecnológico y FP. «La crisis dejó al sector tocado, pero ahora la arquitectura técnica tiene pleno empleo»

35 centros educativos de la provincia participan en la fase local del Gran concurso del Hormigón
Tres grupos de una docena de estudiantes de 1º de Bachillerato del IES Cardenal López de Mendoza se afanaban en realizar la mezcla correcta de grava, arena, cemento y agua para crear su propio hormigón. Han pasado de la teoría de materiales del libro de Tecnología a la parte práctica. Espátula en mano se disponían a realizar la mezcla en un recipiente de plástico. Después tendrán que llenar un vaso de cachi con el hormigón y cuidarlo durante unos días, para que no se agriete. El objetivo: tener el testigo más resistente para alzarse con el primer premio de ‘El Gran Concurso de Hormigón’.
«Buscamos dar a conocer entre los chavales el mundo de la construcción y sus diferentes profesiones como la de arquitecto técnico», señaló el presidente del Colegio Oficial de Arquitectos Técnicos de Burgos (COATBU), José Ignacio Pérez Gonzalo. Burgos es una de las 12 ciudades de España, entre ella Salamanca y León, que participan en esta iniciativa que tendrá una fase nacional a la que pasarán los ganadores de Burgos.
La crisis económica hizo una grieta profunda en el sector de la construcción que aún sigue sellándose. La falta de personal laboral es una constante en diferentes oficios. «La crisis dejó al sector muy tocado y en el ámbito de la arquitectura técnica se empieza a recuperar personal en las aulas y los que salen de la universidad tienen trabajo porque hay pleno empleo, en cuanto a la mano de obra cualificada, que se nutre de la Formación Profesional de oficios, y la industrialización que se realiza en el sector es muy parcial, se necesita gente en la construcción», reivindicó Pérez Gonzalo.
La vicerrectora de Estudiantes de la Universidad de Burgos, Sara Gutiérrez, remarcó que en la UBU el Grado de Arquitectura Técnica y el Doble Grado de Ingeniería Civil y Arquitectura Técnica, sigue incrementando estudiantes matriculados tras la apatía de los años de la crisis de la construcción. «Ésta es una iniciativa maravillosa con la que los estudiantes pueden conocer mejor esta profesión que se pueden estudiar aquí en Burgos con una demanda que va in crescendo», apuntó. La UBU cuenta con 72 matriculados en el primer curso de arquitectura técnica y 17 en el doble grado. «Notamos año a año cómo va incrementando la matriculación», remarcó Gutiérrez. La iniciativa para los centros de secundaria es «interesante porque nos permite realizar actividades con las que los alumnos entran en contacto con su posible futuro académico», señaló el director del IES López de Mendoza, Francisco Javier Salas.
En la primera edición en Burgos de ‘El Gran Concurso del Hormigón’ participan un total de 30 institutos de Secundaria con estudiantes del primer curso de Bachillerato Tecnológico y centros Formación Profesional de la rama de la construcción de toda la provincia. Cada grupo cuenta con una docena de participantes de media que se afanan en estos días en replicar la mezcla perfecta para lograr el hormigón más resistente.
«En 28 días, el plazo en el que el hormigón termina de secarse en una probeta como la que hemos replicado en el vaso, se realizarán las pruebas para romper el hormigón en la Escuela Politécnica Superior de la UBU en una realización de pruebas que trataremos de que pueda seguirse vía streaming por Youtube», añadió el portavoz de los aparejadores burgaleses.
De esta manera, el concurso trata de emular las pruebas de fuerza a la que se someten los testigos de hormigón para su uso en la construcción de edificios. El sistema real, que replicaban ayer los 30 alumnos del López de Mendoza, permite crear cinco testigos de hormigón en probetas de 40 centímetros de alto y 20 de ancho. Se realizan cinco pruebas. Dos se rompen a los siete días y dos a los 28. Debe cumplir unos baremos de resistencia definidos por ley. El quinto testigo se guarda por si los anteriores no funcionan.
Un truco para los participantes. Es necesario que la estructura se someta a una humedad constante. Hay que mojarlo con un poco de agua, no se puede secar completamente en los 28 días de curación.
El cachi de hormigón más resistente irá a la final nacional y recibirá también un viaje costeado por el COATBU a Aranda de Duero con almuerzo y comida, una visita a las instalaciones de Gerardo de la Calle y la empresa burgalesa de edificación industrializada de hormigón Artepref y una visita a las instalaciones y laboratorios de la Escuela Politécnica Superior de la UBU.