ATAPUERCA
Doña Sofía resalta la vocación de «liderazgo mundial» del Centro de la Evolución Humana
La Reina inauguró el Cenieh y visitó los principales laboratorios e instalaciones. Su Majestad se mostró muy interesada por todo el trabajo que se desarrolla en el centro
M.R. / BurgosEra una visita muy esperada y deseada tanto por los responsables del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (Cenieh) como por la reina Doña Sofía, que ayer inauguró el centro, el primero de los tres edificios del Complejo de la Evolución Humana que se pondrá en funcionamiento poco más de tres años después del inicio de su construcción.Es conocido el interés y el conocimiento de Doña Sofía por la cultura y más concretamente por las cuestiones relacionadas con la evolución humana y Atapuerca, ya que entre su formación destacan estudios de Arqueología. No en vano, mientras visitaba ayer el Cenieh hizo referencia a que este centro ha nacido con vocación de convertirse en una referencia a nivel mundial en el estudio de la evolución humana. La visita inaugural que ayer realizó la Reina fue corta pero intensa. Durante cerca de media hora, Doña Sofía tuvo ocasión de conocer algunos de los principales laboratorios y centros de estudio del Cenieh. Acompañada, entre otras personalidades, por la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, y el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan_Vicente Herrera, la Reina contó con las explicaciones de José María Bermúdez de Castro, director del Cenieh y codirector del equipo investigador de los yacimientos de Atapuerca. La visita comenzó a las 11 de la mañana, después de que la Reina descubriera una placa conmemorativa en la que se hace referencia a la inauguración del centro. A continuación, la comitiva encabezada por la Reina se dirigió a la primera planta del centro, donde visitó el laboratorio de restauración. Tras saludar a dos de las investigadoras que trabajan en el laboratorio, Doña Sofía se interesó por unas piezas que había sobre una mesa de trabajo, exponiendo varias dudas y preguntas a Bermúdez de Castro y a las dos investigadoras. En esta unidad de restauración, la reina planteó preguntas sobre cómo es el proceso que hay que llevar a cabo para segregar los fósiles de los soportes.Junto a este laboratorio, también visitó el de Microscopía, una unidad por la que mostró mucho interés, según relataba Enrique Plaza, presidente de la comisión ejecutiva del consorcio del centro. «Se ha interesado sobre aspectos en microscopía, sobre todo lo que estaba viéndose en los microscopios», explicaba Plaza. Precisamente, en este laboratorio es donde se estaban estudiando dientes con una antigüedad cercana a los 500.000 años. En todo momento, la Reina hacía preguntas y se interesaba por lo que se estaba haciendo. Doña Sofía continuó con su visita en la tercera planta, donde se encuentran los laboratorios de Rayos X, de Geoquímica y Arqueometría y Resonancia Paramagnética Electrónica, así como las unidades de Arqueomagnetismo, Uranio-Torio, así como la de preparación de muestras, conocidas también como salas blancas. Fue en una de estas salas donde la reina preguntó por qué en casi todas las investigaciones importantes se habla de dientes. «Se le ha explicado cómo el diente es la parte del esqueleto humano que tiene mayor duración», afirmaba ayer Enrique Plaza. A pesar de la rigidez de la visita y del excesivo protocolo, la reina tuvo ocasión de mostrar naturalidad y sentido del humor durante buena parte de la visita. Fue precisamente en una de las salas blancas donde, tras explicarle el porqué de la importancia de los dientes en las investigaciones arqueológicas, señaló que «es curioso cómo los dientes son tan importantes al cabo de cientos de miles de años y en cambio nos duran tan poco», dijo Plaza que comentó Doña Sofía.Las preguntas y los comentarios de la Reina fueron continuos a lo largo de la intensa visita. «Se veía que estaba enterada» de cuáles son los objetivos y el sentido de esta dotación científica. A pesar de que el recorrido por el centro apenas duró media hora, «ha sido densa en preguntas» por parte de la Reina. Según afirmaba al final de la visita el presidente de la comisión ejecutiva del consorcio del Cenieh, la Reina había salido muy satisfecha y contenta del recorrido. Tras conocer algunas de las principales instalaciones del centro, Doña Sofía fue a firmar en el libro de honor del Cenieh, pero antes, rompiendo el protocolo, quiso saludar personalmente a los miembros de los equipos de investigación, así como a los invitados y periodistas._Firma en el libro de honorTras unos saludos informales, la Reina estrenó el libro de honor del centro, con una dedicatoria en la que auguraba y deseaba éxito a los investigadores. Una firma de la que no se pudo saber su contenido exacto porque inmediatamente se llevaron el libro y se negaron a desvelar el mensaje dedicado, que sí se pudo conocer, por otra parte, en la firma que la Reina realizó unas horas después en su visita a la nueva sede de la Fundación Atapuerca, en Ibeas de Juarros.Al final de la primera visita de una apretada agenda en Burgos, Su Majestad subía al coche que la iba a conducir al segundo de sus destinos, los yacimientos de la sierra de Atapuerca. Pero antes, pudo comprobar el afecto y el cariño de los burgaleses, que esperaban a la salida para saludarla. la Reina respondió al calor popular saludando a los vecinos, a los que sumaron numerosas personas que observaban desde las ventanas del edificio de la Junta ubicado junto al Cenieh y muchos de los empleados que trabajan en las obras del Museo de la Evolución y el Auditorio.