El Correo de Burgos

El Ayuntamiento ordena a los dueños de Laín Calvo 7 que ejecuten la demolición del edificio

El Consistorio obligará a los propietarios a respetar las fachadas del inmueble

Burgos

Creado:

Actualizado:

El Ayuntamiento decretará esta semana la orden de ejecución de las obras de demolición del edificio sito en el número 7 de la calle Laín Calvo. De esta forma hace cumplir una sentencia firme del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) a favor de la declaración de ruina que había solicitado la empresa propietaria de la mayor parte de este inmueble.

El decreto, que toma como referencia un informe de los técnicos municipales sobre el estado del edificio, obligará a la propiedad a conservar las fachadas, entre otros elementos originales. El estudio también hace una valoración del coste de las obras que la concejal de Licencias, Dolores Calleja, avanza que será abultado, ya que «se trata de una intervención importante».

El Ayuntamiento fijará un plazo de tiempo «razonable» para que los titulares del número 7 de Laín Calvo intervengan. En caso contrario tendrá que asumir la ejecución subsidiaria de las obras, aunque después pasaría la factura a los propietarios.

El inicio de la tramitación para la demolición de este bloque se remonta al año 2007. Entonces la propiedad presentó una solicitud de ruina al Consistorio y la acompañó de un proyecto que ahora tendrá que revisar, puesto que las partidas que contemplaba el documento se habrán incrementado. Si entonces no prosperó aquella intervención fue por la negativa del Ayuntamiento, que rectificó la aprobación inicial para acabar rechazando el expediente de ruina al tratarse de un edificio protegido.

Batalla legal contra la ruina

Los esfuerzos del Gobierno local y de los arrendatarios por impedir la declaración de ruina de este edificio, que goza de la máxima protección del Plan Especial del Centro Histórico (PECH), acabó en los tribunales.

El Ayuntamiento perdió la batalla contra la empresa propietaria de las diez viviendas del bloque y de los locales comerciales sitos en los bajos. Tan sólo uno escapa a la propiedad de la promotora y, según el Consistorio, su dueño no estaba de acuerdo con la declaración de ruina del inmueble.

También perdieron la contienda judicial los inquilinos de las viviendas. Pagaban un alquiler de renta baja y, después de muchos años, han tenido que abandonar sus casas. La única familia que aún permanece en este bloque alega problemas económicos para acceder a una vivienda en alquiler y espera la ayuda de las instituciones. Su domicilio de los últimos 32 años en el número 7 de Laín Calvo tiene los días contados y todos sus vecinos han desalojado el edificio.

Ahora las puertas están tapiadas para evitar la ocupación de las viviendas vacías y, con el decreto que el Ayuntamiento publicará esta semana, la demolición del edificio es cuestión de meses aunque depende en buena parte del propietario.

Un edificio entre dos calles

La entrada al inmueble se encuentra en la calle Laín Calvo, pero el bloque linda también con la plaza Huerto del Rey (Las Llanas).

En esa parte el edificio cuenta con dos locales en los bajos alquilados por dos negocios hosteleros a los que la ruina también les obligará a mudarse.

De los locales que tiene en la calle Laín Calvo, sólo uno está ocupado. Se trata de la lonja del propietario disconforme con la declaración de ruina, pero la resolución del TSJCyL acabará obligando a sus arrendatarios a trasladar el negocio a otra ubicación, tal y como señalaron a este periódico los afectados.

 

tracking