Caja de Burgos se une a las de Canarias, Navarra y Baleares con la sombra del veto de la Junta

M.R. / J.L.F. DEL CORRAL/ Burgos

Caja de Burgos formará el Grupo Banca Cívica junto a Caja Navarra (CAN), CajaCanarias y ‘Sa Nostra’ de Baleares, según acordó ayer por unanimidad el Consejo de Administración de la entidad burgalesa en una reunión extraordinaria.Según anunció ayer el presidente de Caja de Burgos, José María Arribas, la fórmula de integración se articulará a través de un grupo de económico consolidado (GEC), «un instrumento más flexible que el de la fusión». Poco después de oficializarse este anuncio, el Ejecutivo regional mostraba su rechazo a este proceso que acaba de dar los primeros pasos. «La Junta de Castilla y León no autorizará esta integración de Caja de Burgos con entidades interregionales». Así de contundente se mostró ayer una voz autorizada del Gobierno regional en declaraciones a EL MUNDO. El Ejecutivo autonómico encajó con malestar lo que ya veía venir desde hace semanas.

Abiertamente nadie en la Junta quiso responder con contundencia a este desafío de la entidad burgalesa, pero fuentes del Ejecutivo  advirtieron de que no han promovido el cambio en la Ley de Cajas para poder autorizar o denegar este tipo de ‘fusiones virtuales’ para después darle el visto bueno.

Más suave, pero también con decepción y malestar se expresó el  vicepresidente segundo de la Junta y consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, que optó por no valorar el acuerdo del consejo de administración de Caja de Burgos para su integración con las tres cajas foráneas en el Grupo Banca Cívica. No obstante, el número tres de la Junta consideró que la entidad que preside José María Arribas debe acoger también a las cajas de Ávila y Segovia.

«En primer lugar quiero manifestar mi respeto a la autonomía y a las decisiones de las cajas», declaró el titular de Economía de Castilla y León, al tiempo que manifestó que el Gobierno regional desconoce oficialmente esta operación «y no puede valorarla». Eso si, reconoció que el Gobierno regional no comparte esta decisión. Al alto cargo de la Junta le parece «sorprendente» que la entidad burgalesa «rechazase hace un año o no tomase en consideración» un modelo que ahora bendice. «Resulta sorprendente que en su día no dedicaran ni tres cuartos de hora a estudiar una integración con cajas de la Comunidad autónoma y hayan aceptado ésta tan rápido», añadió. Villanueva insistió en la paradoja de que «Caja de Burgos y alguna organización empresarial»,  en referencia a la patronal burgalesa, defiendan ahora que la SIP es la mejor solución para fortalecer el sistema financiero cuando rechazaron hace un año ese mismo modelo propuesto por la Junta de Castilla y León, el  PSOE y la mayoría de las fuerzas económicas y sociales de la región. «Hoy alguien tiene que dar explicaciones de por qué esas fórmulas se hacen con cajas de fuera», concluyó el consejero, informa Europa Press. Asimismo, preguntado por el apoyo de los consejeros de PP y PSOE a la integración de Caja de Burgos en el Grupo Banca Cívica, Villanueva expresó su respeto a estos representantes políticos, como lo hizo cuando se «apartaron» del proyecto de fusión con Caja España y Caja Duero. Villanueva se mostró convencido de que los consejeros de PP y PSOE tendrán una información adecuada respecto a un proyecto que, a su juicio, no existirá de forma oficial hasta que se presente.

Oportunidad histórica

Arribas se mostraba ayer, por contra, exultante. Hasta el punto de calificó como «una oportunidad histórica y una magnífica noticia». El presidente de Caja de Burgos dijo estar «especialmente satisfecho» porque el Consejo de Administración ha tomado una decisión que es «buena para la Caja de Burgos, es buena para Burgos y es buena para Castilla y León». En otras palabras, la dirección que ha decidido tomar la entidad es «es buena para la plantilla, para los clientes y para el conjunto de la sociedad en la que operamos».

Arribas quiso recalcar que «seguimos y seguiremos siendo la Caja de Burgos, estando en Burgos y desarrollando nuestra acción en Burgos y en Castilla y León».

El secretario autonómico del PSOE, Óscar López, aseguró ayer en Segovia que es una «buena noticia». Para López, es motivo de satisfacción el que la entidad financiera «se mueva», lo que demuestra «que nadie se puede quedar solo», tal y cómo pedían los socio, según Ical. El coordinador regional de Izquierda Unida, José María González, manifestó su apoyo a la decisión de la Junta de Castilla y León de vetar las fusiones de cajas de diferentes comunidades autónomas, algo que a su juicio es «de las únicas medidas inteligentes» adoptadas en este proceso, pero lamentó que «llega muy tarde» y que deberían haberse tomado hace tiempo.

La apuesta de Caja de Burgos de formar parte de un proyecto interregional de Cajas llega un mes después de que la entidad decidiera rechazar su participación en la fusión con Caja Duero y Caja España. Este ‘no’ a unirse a las otras dos entidades regionales no ha supuesto que Caja de Burgos «haya seguido explorando alternativas variables». Arribas trató de explicar a grandes rasgos en qué va a consistir el Grupo Banca Cívica.

Visto inicial del Banco España

En el caso de que finalmente fructifique el proyecto, el presidente de Caja de Burgos quiso dejar claro que la entidad mantiene su esencia. «Se trata de un proyecto que mantiene nuestra identidad, nuestra franquicia de negocio, la marca Caja de Burgos, que mantiene nuestra personalidad jurídica, nuestra obra social y cultural, nuestra red comercial, nuestro compromiso con Burgos y con Castilla y León», aseguró. El futuro grupo cuenta con el visto inicial del Banco de España, institución ante la que se presentó la propuesta de contrato y el plan general de integración.

La sede financiera, en Madrid

M. R.

El presidente de Caja de Burgos afirmó que para la puesta en marcha del grupo se creará una «sociedad central, participada por las cajas, que actuará como una entidad de servicios financieros plena». Esta entidad, según lo que adelantó ayer Arribas, tendrá su sede en Madrid. «Se creará bajo una figura jurídica aún pendiente de decidir e integrará negocios y servicios operativos comunes, así como la emisión de buena parte de las políticas generales de negocio de las cuatro cajas», explicó. Esta sede central, además de  las políticas estratégicas, «aglutinará las funciones de las que se obtengan sinergias desde el punto de vista de eficiencia y productividad».  

Ávila y Segovia

Esta sociedad central servirá par integrar los negocios y los servicios de operaciones comunes. El presidente de Caja de Burgos habló de que la fórmula de la integración con las otras tres Cajas es un «modelo de crecimiento atractivo, perfectamente equilibrado para cuatro cajas parecidas, sólidas y saneadas». Caja Navarra ofrece unas cifras de negocio ligeramente superiores a las otras tres cajas. En este sentido, la entidad navarra lleva cinco años desarrollando este modelo con más de 5.000 entidades que se han sumado al proyecto. Aunque está concebido como un proyecto interregional, el Consejo de Administración aprobó que la entidad intensifique «de forma inmediata» los contactos con Caja Segovia y Caja Ávila para «fortalecer el sistema financiero regional».

En opinión de Arribas, la fórmula del grupo de integración entre las cuatro cajas supone una «revolución» en la concepción de las entidades bancarias, un paso y un avance hacia una nueva filosofía financiera.