El Correo de Burgos

El servicio de préstamo de bicicletas eleva el número de usuarios a 425

El Ayuntamiento se muestra satisfecho con el interés despertado entre la ciudadanía

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Burgos

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GABRIEL DE LA IGLESIA /  Miranda

En poco menos de año y medio, los mirandeses se han acostumbrado a ver pasar por las calles las bicicletas del servicio de préstamo que se implantó en la ciudad en septiembre de 2008.

En estos momentos, el servicio cuenta con 425 usuarios, un «buen dato» teniendo en cuenta la novedad de la iniciativa. En este sentido, el primer edil, Fernando Campo, se muestra «satisfecho» del desarrollo del servicio durante los primeros meses de vida, sobre todo en verano, cuando el número de usuarios «sube bastante» motivado por el buen tiempo. De hecho, se espera que la tendencia al alza registrada desde el comienzo continúe una vez pasado el invierno.

Superados ya los primeros meses de andadura de un servicio que viene implantándose desde hace años en multitud de ciudades españolas, el Ayuntamiento acaba de aprobar el pliego de cláusulas para la contratación del mantenimiento del mismo durante los próximos ejercicios por un importe de 33.500 euros anuales con una vigencia de 4 años.

Como contraprestación, la empresa adjudicataria del contrato deberá encargarse del almacenamiento de las bicicletas y su redistribución diaria entre los cinco puntos de alquiler diseminados por la ciudad, así como de la revisión, mantenimiento y reposición de las mismas en caso de avería. También se incluye en el contrato el control y mantenimiento del sistema informático gracias al cual se prestan las bicicletas.

Actualmente, el servicio se articula a través de cinco puntos de préstamo: parque Antonio Machado, parque Antonio Cabezón, plaza de La Estación, polideportivo municipal de Anduva y plaza de España (este último tuvo que ser desinstalado temporalmente con motivo de las obras de reforma proyectadas en la plaza). Éstos puntos están operativos diariamente (salvo contadas excepciones) de 7.30 de la mañana a 21 horas, cuando los operarios retiran las bicicletas para que duerman bajo techo. Aquel usuario que quiera utilizar una de las bicicletas aparcadas en cualquiera de estos lugares sólo tiene que utilizar una tarjeta personalizada para retirarla mediante el equipo informático que hay junto a cada punto de préstamo.

Futuro a corto plazo

Teniendo en cuenta la capacidad financiera actual del Consistorio y el desarrollo que está teniendo el préstamo de bicis en la ciudad, de momento no se contempla una ampliación del mismo, al menos a corto plazo.

A este respecto, Campo ha señalado que «si logramos subvenciones del EREN» (que ya participó en su día en la implantación del servicio), el Ayuntamiento podría plantear en un futuro la instalación de algún punto de préstamo más. En cambio, «sino hay subvención no va a haber ampliaciones», ya que «la política de control del gasto municipal» puesta en marcha no permite excesos presupuestarios en este sentido.

Lo que está claro es que, lleguen ayudas o no, desde el Consistorio «se va a seguir apostando» por una iniciativa tendente a cambiar los hábitos de movilidad en la ciudad, zanja el alcalde.

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