Una médico de Belorado escapa de un hombre que la amenazó con una pistola

J.C.R. / BurgosLa consulta médica de Belorado estaba tranquila desde primera hora de la mañana del martes. Sin embargo, pasadas las 13.45 horas, la situación se complicó. A esa hora, un hombre de 56 años que responde a las iniciales D.R.V, entró en la consulta de la doctora Concha Cervera para solicitar unas recetas. La médico le dijo que esa prescripción tendría que esperar a recogerla al día siguiente, cosa que aceptó el paciente porque había acudido sin cita. En ese momentó aprovechó D.R.V. para sacar un asunto personal sin resolver y que «le interesaba a él y por lo que culpa a la mujer. Y le espetó a la facultativa:«Esto no se puede quedar así».En ese mismo momento se echó mano a la cintura, y «montó la pistola», relataba la médico, «y me apuntó directamente». La médico no podía salir de su asombro: «Era como en las películas, no podía estar pasando», relataba ayer a este periódico. Volvió a repetir el presunto agresor que «Esto no se podía quedar así» y la doctora Cervera lo reafrirmó: «Pues claro que no puede quedarse así; voy a llamar ahora mismos a la Guardia Civil», reaccionó.Pedir las recetas fue la escusa perfecta para poder entrar en la consulta y sacar la pistola para amenazar a la facultativa.La siguiente maniobra del pistolero fue cerrarla el paso, pero de manera hábil, la mujer rodeó su mesa y fue capaz de sortearle: «Abrí la puerta y salí».Probablemente el hombre no se esperaba la reacción de la doctora y salió del centro de salud y se marchó. Avisados los agentes de la Guardia Civil detuvieron a este hombre que contaba con varios antecedentes, como autor de un delito de amenazas con arma.El hombre era paciente de otro cupo hasta hace un año, cuando la doctora se hizo cargo de él. Las fuentes consultadas en el pueblo sí indican que era una persona «conflictiva», pero nunca hasta el extremo de proceder como lo hizo el martes pasado.La doctora Concha Cervera entiende que sucesos de este tipo «son posibles», aunque es la primera vez que le ocurre a ella. Reconoce que en espacios como el centro de salud de Belorado están más «cubiertos» porque hay personal médico, «no está solo el médico como ocurre en otros lugares como en Pradoluengo donde el médico hace guardia solo y puede pasar cualquier cosa», denunció. «Ahora ahy cuatro personas aquí que ante cualquier incidente pueden reaccionar, pero hay muchos pueblos en los que sólo está el médico de guardia», lamentaba, «eso ante cualquier ataque, pero y si ocurre una urgencia realmente complicada, ¿qué hace uno solo?», se preguntaba Cervera.Ahora, el temor de todos es que tras pasar por el Juzgado el presunto atacante «vuelva a la puerta del centro de salud» en unos pocos días.Allanamiento y hurtoDe otro lado Guardia Civil ha detenido en un pueblo cercano a Lerma a las mujeres A.M.F, de 20 años y a S.C. de 30, con varios antecedentes policiales, por allanamiento de morada y hurto. Las dos mujeres entraron en una casa y sustrajeron dinero, documentación y tarjetas de crédito pero fueron sorprendidas y retenidas por los dueños de la casa hasta la llegada de la Guardia Civil.También agentes de la Guardia Civil detuvieron en un pueblo de las Merindades a A.R.M, de 23 años, como presunto autor de simulación de delito. El joven denunció el robo de 600 euros que acababa de sacar de un cajero por de tres individuos. Finalmente se ha comprobado la falsedad del robo que el joven simuló para justificar ese gasto de dinero. Los agentes del Cuerpo Armado también procedieron a detener en otro pueblo de Las Merindades a M.S.C. de 54 años como presunto autor de un delito de apropiación indebida. El hombre se apoderó de una gran cantidad de válvulas que pertenecían a otra persona a la que dejó guardarlas en su nave.