El equipo de Gobierno renuncia a pedir un crédito para el presupuesto de 2011

GABRIEL DE LA IGLESIA / Miranda

El equipo de Gobierno mirandés recula. Dos meses después de que el alcalde adelantara la intención de solicitar un nuevo crédito de 2 millones de euros para financiar las inversiones previstas para el próximo ejercicio, el propio Campo confirmaba esta semana que la idea se ha desechado. Y es que, según explica el primer edil, los remanentes de tesorería con los que se cerrará este ejercicio, sumados a la financiación que llegará desde la administración regional a través del Pacto Local permitirán cubrir las expectativas inversoras que mantiene el Ejecutivo mirandés de cara al próximo ejercicio. «Necesitábamos dos millones y los hemos sacado de otros sitios», resume Campo.

Buena parte de ese montante llegará desde Valladolid, pero otra gran parte se aportará gracias al «ahorro del presupuesto de gastos e inversiones de este año». De hecho, la baja presupuestaria con la que se han adjudicado varios de los proyectos financiados a través del presupuesto de 2010 permitirán al Ayuntamiento contar con un buen colchón económico durante los próximos meses. «Hay bajas de hasta 300.000 euros», subraya el primer edil al tiempo que incide en que «uno de los criterios que se ha dado es que no se gaste más» de lo planteado en dichas adjudicaciones, una práctica muy común hace no tanto tiempo. «Puede haber algún caso» en el que el sobrecoste dispare el presupuesto de una obra promovida por la administración local, pero esos ejemplos se han minimizado, sostiene Campo.

A toda esta aportación inicialmente no prevista para las cuentas de 2011 se le sumarán casi 500.000 euros derivados de sendas actuaciones urbanísticas promovidas por empresas inmobiliarias de ciudad que tampoco estaban previstas.

Además, el alcalde insiste en que el del año que viene será «un presupuesto ligero» en materia de inversiones, motivado en gran medida por la convocatoria de las elecciones locales y autonómicas que pueden cambiar el mapa político de la ciudad del Ebro a partir del próximo mes de mayo. Así, en principio se plantean únicamente las «inversiones básicas» y aquellas aportaciones ya programadas con anterioridad, como las correspondientes al ARCH, al Apolo y al convenio para la mejora de San Juan del Monte.

Sin endeudamiento extra

Gracias a este contexto, el Ayuntamiento no tendrá que acudir a un nuevo crédito para financiar los proyectos planteados el año que viene, conteniendo de esta forma el nivel de endeudamiento que ya registra, sobre todo tras la solicitud de un crédito de 6,8 millones de euros para financiar las inversiones que se están materializando durante este ejercicio.

Eso sí, la administración local aún tiene un amplio margen de maniobra. De hecho, tras el levantamiento de la restricción al endeudamiento a los Consistorios más saneados anunciado hace varias semanas por la ministra de Economía, Elena Salgado, los servicios técnicos municipales echaron cuentas y el resultado fue satisfactorio. En el peor de los escenarios posibles, la deuda del Ayuntamiento no superaba el 75 por ciento, permiténdose así el lujo de acudir a nuevas operaciones financieras.

Antes de fin de año

Una vez definido este aspecto, el equipo de Gobierno trabaja ya en la redacción de los presupuestos para el próximo ejercicio. Tal y como afirma Campo, «la parte técnica está bastante avanzada», por lo que se espera tener el documento finalizado a lo largo de las próximas jornadas. Después, las cuentas públicas deberán someterse a votación plenaria y la intención es tenerlas aprobadas antes de final de año, tal y como sucediera ya con los presupuestos de 2010.

Para ello, ya se ha dado luz verde al expediente de modificación de las ordenanzas fiscales. Un documento que contempla incrementos de buena parte de los impuestos y tasas municipales pero que en ningún caso superará el índice del IPC previsto, el cual se eleva hasta el 2,1 por ciento.