Los visitantes de diciembre salvan la temporada turística en Briviesca

GERARDO GONZÁLEZ / Briviesca

El frenazo al crecimiento del turismo en la capital burebana que anunciaban las últimas cifras oficiales ha quedado constatado al cierre del ejercicio con un aumento del 0,8% respecto a 2009.

La irregularidad en las cifras de visitantes en la Oficina Municipal de Turismo ha sido la tónica dominante aunque afortunadamente en diciembre se logró enjugar el descenso de turistas.

Así, a final del año se han contabilizado 32.650 visitantes lo que supone un incremento de 267 respecto al mismo periodo del ejercicio precedente.

Cabe destacar que en 2009 la cifra de aumento fue del 12% manteniéndose esta dinámica desde los años 2007 y 2008 atraídos principalmente por la riqueza patrimonial y los espacios naturales de su entorno.

Como es habitual los meses con menos visitantes fueron los invernales aunque en el más bajo de ellos, febrero, se contabilizaron 1.154 turistas.

Este año no se ha producido el habitual incremento paulatino de visitantes rompiendo la tendencia tradicional sino que se han constatado saltos apreciables de forma mensual.

Así en los meses de marzo, abril y mayo la cifra de visitantes superó a los de junio, algo inédito, alcanzando las cifras máximas los meses de julio y agosto.

Por cifra de crecimiento respecto a la campaña precedente destacan agosto y octubre aumentando en casi un millar en el primero y casi cuatrocientos en el segundo.

Cabe recordar que estas cifras corresponden solamente a los visitantes que han demandado información en la oficina municipal por lo que la cifra real de visitantes es superior a la estadística oficial.

Un dato de importancia es que residentes en la práctica totalidad de las comunidades autónomas españolas han visitado Briviesca este año alternándose como principal origen País Vasco y Castilla y León. También ha comenzado la llegada de un turista de características singulares hasta la fecha prácticamente inexistente en la ciudad. Éstos son los peregrinos que optan por la antigua Vía de Bayona en su viaje hacia Santiago de Compostela.

El incremento del turismo extranjero vinculado a la Vía de Bayona es aún limitado pero supone una oportunidad de gran interés de cara al futuro.

Por ello las mejoras como la prevista en el túnel del Paseo de la Epitafia resultan imprescindibles para captar visitantes que opten por la antigua ruta jacobea.

La importancia de la puesta en valor de la Vía de Bayona es evidente visto el resultado obtenido por el Camino Francés que tomó el relevo del de Bayona camino de la capital burgalesa.