El Centro Joven se consolida con 292 socios en los dos primeros meses
El concejal de Juventud se muestra «muy satisfecho» por la evolución de la instalación
GABRIEL DE LA IGLESIA / Miranda
La espera ha sido larga, pero ha merecido la pena. El nuevo Centro Joven inaugurado hace ahora dos meses en los antiguos locales de la Tesorería de la Seguridad Social está superando todas las expectativas generadas. Según el último recuento realizado por la concejalía de Juventud, la instalación cuenta ya con 292 socios, y el número sigue en aumento.
«La verdad es que los primeros días fueron una barbaridad. Los monitores no tenían tiempo material para hacer los carnets», explica el responsable del área, Alexander Jiménez, que se muestra «muy satisfecho» de la evolución que se está registrando. No en vano, tras unos primeros días de auténtico fervor, las visitas a la instalación se fueron reduciendo, pero no han acabado, ni mucho menos.
«Estamos recibiendo la visita de unos 20 chavales por día» y actualmente «se están realizando una media de cuatro carnets» por jornada, subraya el concejal. «Es un goteo» que no hace sino prolongar la buena respuesta obtenida por la instalación durante las primeras semanas y que se espera mantener hasta enero del año que viene, cuando la inscripción deje de ser gratuita.
Al respecto, Jiménez adelanta que será durante el debate de modificación de tasas de este año cuando se establezca el precio definitivo, si bien, la idea inicial pasa por plantear cuotas «de unos 20 euros al año». «Se trataría de algo simbólico, para hacerles entender que las cosas cuestan dinero» y no para financiar la totalidad del servicio, que supone un gasto de «unos 60.000 euros al año para el Ayuntamiento».
Pero mientras llega esa fecha, los que ya se han inscrito están aprovechando al máximo las posibilidades del centro. Y no son pocas. Tal y como plantea Jiménez, «los juegos más usados con muchísima diferencia hasta ahora son el futbolín y el billar», debido, entre otros aspectos, a que «los chavales no los pueden tener en su casa», como así sucede con otras de las alternativas de ocio ofrecidas en la instalación, como las videoconsolas o los juegos de mesa.