266 de los 371 municipios de la provincia han perdido población en la última década

J. C. R./ Burgos

Las políticas de fijación de población de las administraciones públicas estatal, autónomica y provincial parece que no dan resultado. Al menos eso demuestran los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) que determinan que de los 371 municipios de la provincia de Burgos, 266, es decir el 72%, pierden población, mientras que 105 la mantienen  o crecen (28%) en la última década.

Son datos publicados por la Fundación Perspectivas y que dejan bien a las claras que, sin riesgo de equivocarse, la población extranjera llegada a la provincia ha soportado el padrón de población burgalesa ya que éste se mantiene en el entorno de los 375.000 habitantes. De hecho, la mayor parte de los municipios burgaleses han perdido población a lo largo de la última década. Descontando las áreas urbanas y sus entornos metropolitanos, Burgos, Miranda de Ebro y Aranda de Duero, la situación común en la provincia es de retroceso demográfico continuo.

En su conjunto, en una década, la provincia ha crecido un 8%, pero  los municipios menores de 2.000 habitantes apenas experimentan un aumento del 0,7% en este tiempo. Y si nos centramos en los pueblos menores de 500 habitantes, el 84% de los municipios de la provincia, entre 2000 y 2010 pierden el 8% de su población.

Si bien parece que la población nacional no crece en la misma medida que en el resto del territorio nacional, la población extranjera sí lo hace de manera significativa. En apenas 10 años, el número de inmigrantes extranjeros en la provincia de Burgos se ha multiplicado por 15, pasando de 2.257 a 34.566 habitantes empadronados.

Así, Burgos es la séptima provincia española con mayor crecimiento relativo del número de extranjeros y experimenta un incremento muy superior al registrado en Castilla y León (multiplica por 9,2) y en España (por 6,2). La explicación hay que encontrarla en el empleo. La provincia, ahora mucho menos que hace unos años por al crisis, atrae población por su industria, el campo y los servicios. Y durante los primeros años de la década, por la construcción.

Nacimientos y muertes

Según el informe de la Fundación Perspectivas, de los 371 municipios de Burgos, nada menos que 223 tienen un saldo vegetativo negativo, es decir, el 60% de los municipios de la provincia registraron más muertes que nacimientos entre 2000 y 2009. Si bien la situación de la provincia de Burgos es levemente mejor que en la de Castilla y León donde el porcentaje de municipios con saldo vegetativo negativo es del 73%.

Y en 201 ayuntamientos, es decir el 54% de los 371, el número de muertes en el periodo 2000-2009, al menos, duplicó al de nacimientos.

Si en casi todos los municipios de la provincia de Burgos mueren muchas más personas de las que nacen, la dinámica demográfica sólo se ha mantenido por la llegada masiva de población inmigrante. Sin embargo, si la tendencia de los próximos años se frena, el incremento continuo de población se romperá y la provincia verá perder población  sin freno.

La tasa bruta de natalidad en Burgos ha crecido progresivamente desde el 8‰ de 2000 hasta el 9,6‰ en 2008, para descender al 9‰ en 2009. El retroceso entre 2008 y 2009 puede relacionarse con la contracción de la actividad económica, y con la paralización de los flujos de atracción de mujeres inmigrantes.

En 2009, el número de hijos por mujer en Burgos se situó en 1,3, una décima mejor que en Castilla y León, pero peor que la situación registrada en España (1,4 hijos). La edad media de la madre primeriza se sitúa en Burgos en 30,2 años, es decir, 0,6 años superior a la media nacional.

En relación con el número de nacimientos, de los 371 municipios de la provincia de Burgos, 63 (17% del total) no registraron ningún nacimiento a lo largo de los últimos diez años. Dicho de otro modo: en casi uno de cada cinco municipios de Burgos no ha nacido ningún niño en toda una década.

Acercando el análisis al trienio 2007-2009, ya son 148 los municipios sin nacimientos. Es decir, entre 2007 y 2009, cuatro de cada diez municipios de Burgos no registraron ningún nacimiento. Y si analizamos el último año con datos (2009), la situación es aún más negativa: 217 municipios, casi el 60% de los burgaleses, no han registrado ningún nacimiento en 2009.

Población envejecida

En la provincia de Burgos una de cada cinco personas tiene 65 o más años (el 20% de la población), mientras que en Castilla y León el porcentaje se situa en el 22,4% y está muy lejos de la media nacional que se sitúa en el 16,6%.

Según la Fundación Perspectivas, entre 2000 y 2009 la tasa bruta de mortalidad en la provincia de Burgos se ha situado de forma casi estable en el entorno del 10‰, siempre más elevada que la tasa nacional, pero ligeramente mejor que en Castilla y León, que acumula cinco décimas más.