La Compañía Petrolífera de Sedano extraerá dos millones de barriles de crudo en Hontomín

J. C. R. / BurgosEl subsuelo de la Lora, Abajas, Huérmeces, Merindad de Río Ubierna, Montorio y Valle de Sedano alberga aún decenas de bolsas de petróleo. Hace 48 años se perforaba por primera vez el suelo de Ayoluengo y el oro negro surgía y hacía soñar con que Burgos se convirtiera en la pequeña Texas. Dos millones de barriles de petróleo siguen latentes a poco más de 25 kilómetros de la capital. Hontomín guarda en su interior un tesoro en crudo. Medio siglo después, renace la esperanza negra.La Secretaría de Estado de Medio Ambiente daba a principios de este mes el visto bueno sobre la evaluación de impacto ambiental del proyecto concesión de explotación de yacimientos de hidrocarburos denominada ‘Huérmeces’ a la Compañía Petrolífera de Sedano S.L., que explota en la actualidad el campo petrolífero de Ayoluengo, situado en el término municipal de Sargentes de la Lora y que posee la titularidad del permiso de investigación de hidrocarburos, por la cesión de los derechos que sobre el terreno que ostentaba la empresa Northern Petroleum Exploration.Los buenos resultados obtenidos en la reentrada de los pozos de Hontomín han hecho que el promotor del proyecto, la Compañía Petrolífera de Sedano S.L, haya solicitado la conversión del permiso de investigación en permiso de explotación para dos de los cuatro pozos en esta localidad. La ventaja es que los pozos ya se encuentran construidos.Barriles diariosSegún el documento ambiental presentado por el promotor, en marzo de 2012 ya se planteó la posibilidad de recuperar los cuatro pozos existentes en el permiso de investigación pero no se planteaban nuevas perforaciones.Se ha delimitado por el método de ‘sísmica 3D’ una gran bolsa de crudo con reservas estimadas entre uno y dos millones de barriles. El promotor estima que la producción diaria estaría comprendida entre las 13 toneladas a las 28 toneladas al día. La vida útil del proyecto, depende de la producción de manera que, con cien barriles de 159 litros por día estaría entre 30 y 40 años y si se aumenta a 200 barriles disminuiría esta a 15 ó 20 años.La proximidad del campo de Huérmeces con el campo petrolífero de Ayoluengo, situado a 52 kilómetros, permite reducir las instalaciones necesarias, de manera que el crudo y el agua que se obtendría en el primero se almacenaría temporalmente en los tanques construidos a tal efecto, para enviarlo posteriormente al campo petrolífero de Ayoluengo mediante cisternas para su procesado, almacenamiento y comercialización.MétodoAdemás el promotor expone en el documento denominado ‘Informe de Subsanación a Medio Ambiente’ de mayo de 2012, que cuando la compañía obtenga el permiso de reentrada se procederá a la impermeabilización y descontaminación de los suelos y aguas, si fuera necesario, semejante al que se está desarrollando en la actualidad en el campo petrolífero de Ayoluengo.Previamente a la ejecución de las operaciones de reentrada en los pozos, el promotor plantea realizar un estudio de investigación de los probables pasivos potencialmente existentes en el subsuelo del emplazamiento.Las instalaciones que se prevé construir son un vallado perimetral y puerta de acceso para cada uno de los pozos; un antepozo y cabeza de pozo con varias válvulas de seguridad; la bomba de balancín; un área de almacenamiento de materiales y equipos de grandes dimensiones que se puedan dejar a la intemperie y un centro de carga de crudo mediante cisternas. En Ayoluengo existen tres tanques de almacenamiento. Uno de ellos con capacidad de 10.000 barriles, aproximadamente 1.600 metros cúbicos, y varios pozos de inyección de agua.FasesEl trabajo se desarrollará en varias fases. El primer paso será el estudio histórico y del medio físico para posteriormente realizar las catas en cada uno de los pozos.