El programa de orientación al empleo atiende a 236 personas en un año

ESTEFANÍA MALDONADO / Miranda

El Ayuntamiento mirandés destinará 85.260,80 euros al servicio de orientación y asesoramiento al empleo, cuyo contrato ha sido revisado y aprobado en Junta de Gobierno Local recientemente. Promovido por Centros de Acción Social (CEAS), y gestionado desde Servicios Sociales, se trata de un servicio cuya misión es la integración sociolaboral de las personas que se encuentran en situación de vulnerabilidad o exclusión social. El programa atendió en 2013 a 236 personas de las que, 105 eran perceptoras de una renta garantizada de ciudadanía, y 72 fueron objeto de inserción laboral.

Para participar en el programa se necesita una cita previa para valorar el grado de discapacidad, vulnerabilidad o exclusión social, por parte de los servicios sociales acreditados. Según la responsable del área de Servicios Sociales, Aitana Hernando, se trata de un servicio destinado a personas con «especiales dificultades de inserción laboral y social», en el que «se trabaja de manera multidisciplinar, no se trata exclusivamente de que tengan una actividad remunerada sino que previamente se trabaja sus habilidades sociales, empleabilidad, su capacidad para pasar una entrevista de trabajo o para enfrentarse a conflictos laborales», señaló Hernando. Además, durante la formación, los participantes realizan talleres prelaborales.

Y es que, para lograr la integración de las personas beneficiarias del programa, se realizan acciones que facilitan su acceso al empleo a través de proyectos personalizados, y mediante la intermediación de los especialistas en el mercado laboral del entorno mirandés.

De este modo, además de un servicio de orientación y asesoramiento sociolaboral individualizado, se trabaja con las personas beneficiarias en «gestionar la información de la oferta de trabajo y formación local». Asimismo, se interviene en red con otros agentes sociales y « trabaja en la motivación para la búsqueda activa de empleo y autoempleo».

En cuanto al índice de empleabilidad, la edil socialista considera que «el porcentaje de 2013 está muy bien, ya que de los 236 casos atendidos, 72 han tenido una actividad económica remunerada y eso es muy importante», señaló.

Como explicaron sus responsables, se considera en situación de vulnerabilidad o exclusión social, a las personas que son perceptoras de renta garantizada de ciudadanía o a quienes habiendo agotado prestaciones se encuentren entre los colectivos de mayores de 45 años, víctimas de violencia de género, familias monoparentales o monomarentales con cargas no compartidas. Así como víctimas de accidente de trabajo, enfermedad profesional o con grado de discapacidad reconocido igual o superior al 33 %, personas toxicómanas rehabilitadas y ex presidiarias, pertenecientes a minorías étnicas y participantes en Programas de Inclusión Social del Ayuntamiento.