Procesión triunfal para Morenito en una encerrona para la historia

IÑIGO CRESPO / Aranda

Clamores por Morenito en Aranda. Honores en el Olimpo arandino para su ídolo, su rey torero vestido de nazareno  y oro. En la vida los sueños se cumplen y ayer Morenito, el de Aranda, cumplió el suyo. Gloria. Todo un pueblo a sus pies. Se midió contra sí mismo para regocijo de su gente. Una plaza volcada desde el minuto uno, un torero sincero como pocas veces, un paso al frente, una batalla vencida. O mejor dos, si tenemos en consideración que el Coliseo arandino se reabría ayer tras dos años de injusto cierre y baturra cerrazón.La justicia gana a la justicia. Como un Dios pagano, Morenito prendió la llama de una plaza abierta a los tiempos y al futuro. Un torero mil veces cuestionado que ayer se  rindió  a su responsabilidad. Como torero, como persona, como hombre y como arandino que es.Morenito hizo lo que tenía que hacer que era torear, respaldar la reapertura de la plaza y triunfar. A hombros se lo llevaron, como un paso de Semana Santa en el epílogo de estas calendas veraniegas. Un paseo triunfal por el cielo arandino en honor a la Virgen de Las Viñas. Izado por su gente, Morenito cumplió un sueño. Por su pueblo. Reto ganado. Cañonazos de victoria en tierra de viñedos. Más información en edición impresa