El intenso frío seguirá siendo protagonista en la provincia

Si bien la nieve parece haber dado una pequeña tregua a la provincia este fin de semana -no por haber desaparecido sino porque la ausencia de nuevas nevadas permitieron mantener las calles y carreteras algo más despejadas-, el hielo y el frío tomaron el relevo prácticamente en todo el territorio burgalés.Prueba de las bajas temperaturas fueron los -14,3 grados con que amaneció ayer domingo Palacios de la Sierra, lo que según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), hizo de ésta la temperatura más baja de toda la comunidad. De ahí que a lo largo del domingo, así como de cara a mañana lunes, se mantenga activada la alerta naranja para las provincias de Ávila, Burgos, Segovia y Soria, principalmente, pues para hoy se esperan temperaturas mínimas de hasta 10 grados negativos.Por el contrario, entre las máximas también se encontró ayer una burgalesa, Medina de Pomar, cuyos termómetros marcaban 3,3 grados al mediodía sólo superada por los 5,5 grados de la abulense Sotillo de la Adrada. Desde la localidad medinesa, su alcalde José Antonio Marañón confirmó las bajas temperaturas, «aunque la ausencia de nevadas nos ha dejado sacar las máquinas y limpiar las principales vías de comunicación con el resto de la comarca y las pedanías, que es una de nuestras prioridades», comentó.Añadió sin embargo, que al estar acostumbrados a nevadas de cierto calibre, «de todas formas hemos estado en contacto con todas ellas así como con los responsables de los centros médicos, ofreciéndoles nuestros todoterrenos para trasladarles en caso de necesidad», afirmó. «Afortunadamente -aseguró el edil-, no hemos tenido problemas con la telefonía y la electricidad, como sí ha afectado a otras zonas».Fue el caso, entre otros puntos, de Valle de Mena, donde si bien el Ayuntamiento ha mantenido todo el fin de semana activos los efectivos de limpieza -lo que ha permitido mantener la comunicación de Villasana con el resto de las localidades vecinas-, también se ayudó a los equipos de Iberdrola a abrir camino por Relloso, en el Valle de Losa. La finalidad, llegar al Pico del Fraile para reparar la avería que sufren desde hace días, y restablecer el servicio de televisión y de la telefonía móvil, tras varios días de intentos fallidos.En cuanto a las carreteras, y a pesar de que también fueron algo mejores -tras los graves percances vividos durante la semana debido al blanco elemento-, el domingo comenzó con la prohibición de tráfico en la N-627 en Basconcillos del Tozo, a cuyos lados la nieve manteníaCircunstancias en dicha carretera que se mantuvieron durante toda la jornada dominical, a las que se sumaron, al cierre de esta edición, el hecho de tener cortados al tráfico los puertos de La Mazorra, Lunada, La Sía, Estacas de Trueba y Masa y la N-627 en Basconcillos del Tozo, BU-504 en Zangandez y BU-704 en Villalomez.Desde Sargentes de la Lora -que permanece prácticamente incomunicada desde hace días debido al más de un metro de altura de nieve que aún les cubre-, sus vecinos explican que «muchos de los problemas los causa la constante ventisca que lleva ésta de aquí para allá». «Por un lado, crea muretes de hielo de gran altura que impiden el paso y por otro, la deja en las carreteras que con la baja temperatura se convierte en hielo».Comentan que si bien están con luz y comunicados -«aunque si se tiene que ir a algún sitio hay que hacerlo con mucha precaución», advierten-, esperan pacientes a que mejore, pues «aunque hemos conseguido que nos suban pan, el resto de los repartidores no han podido llegar».