Estudian entrar en el subsuelo de Clunia con un robot dirigido

Estudiar la posibilidad de entrar en la cueva subterránea de Cueva Román con robots manipulados, tras descubrir la fragilidad de sus paredes tras realizar un estudio radiolocalizador de dicho entorno; el escaneo de las inscripciones y figuras halladas en dichas paredes para poder seguir trabajando con ellas en el exterior, y ubicar en el exterior de Clunia los pozos detectados con las imágenes aéreas y la radiolocalización del subsuelo, son tres de las labores del equipo investigador de Clunia para los próximos 10 años.Así lo avanzaron ayer sus responsables, los investigadores Francesc Tuset y Miguel Ángel de la Iglesia, junto a quienes estuvo el profesor de la Universidad de Zaragoza, José Luis Villarroel, cuyo departamento se ha encargado de la labor de radiolocalización y de digitalización del entorno subterráneo.«Actuación que nos ha permitido entender algunas de las cosas apreciadas en el exterior, así como el trazado de algunas teorías aún por comprobar», añadió Tuset.Y entre ellas, la posible conexión entre el vaciado de dicha laguna -y con ello graves problemas de abastecimiento que comenzaron a hacer de Clunia una ciudad de difícil mantenimiento-, y un error en las obras del teatro, protagonista de las anteriores campañas. «Pues sabemos que la cueva se vacía por la cloaca del teatro, lo que hace pensar que pudo producirse un pinchazo en la laguna del agua, que causó su vaciado hasta en un 60% de su capacidad, lo que quizás explique el secado de sus pozos y con ello, el desabastecimiento».Cueva Román, el aljibe subterráneo del que se surtía el sistema de canalización de aguas de la ciudad de Clunia, se convertirá así en el eje del trabajo de los investigadores durante la próxima década. Como también lo ha sido durante la última campaña de excavaciones, en la que se lograron los objetivos marcados tras la apertura del pozo D6, que permitió el acceso al lugar.El primero, la instalación de una estación de de registro de parámetros ambientales que, entre otros datos, certificó la fragilidad del suelo, así como de las figuras e inscripciones que se hallan en sus paredes. Pero también la realización de mapas topográficos aéreos del entorno exterior, así como de un exhaustivo trabajo de radiolocalización del área subterránea.616.400 eurosTodo ello dio paso a la digitalización del interior para su preservación, «que tuvo que detenerse al descubrir su fragilidad y la posibilidad de desprendimientos, trabajos que intentaremos retomar», explicó Villaroel.Por su parte, el presidente de la Diputación, César Rico, cifró en 616.400 euros la inversión realizada en Clunia durante el último mandato, entre 2011 y 2014. «A los que sumar los 301.600 euros previstos para el presente año, así como el coste de las intervenciones que se llevarán a cabo en 2016», añadió. Año en que esperan tener el proyecto de construcción del nuevo edificio y de mejora de la señalización turística, cuyos pliegos se están elaborando ahora. «Así como el de ampliación de los contenidos de las visitas, en la que el equipo investigador intentará trasladar al público todo lo hallado».