Morenito emerge como figura de una triunfal feria de Aranda

Aranda ha consolidado su feria taurina, segunda tras la reapertura del recinto. Lejos han quedado los años de oscurantismo en los que la villa ribereña se quedó sin festejos taurinos. Ahora en cambio, el futuro se afronta con optimismo a la vera del Duero, y con la sensación general de cumplirse uno de los preceptos de hacer de Aranda un escenario vinculado a la calidad en espectáculos taurinos.Las figuras desfilan por Aranda, el toro se ha racionalizado aunque falta uniformizar las corridas y que salgan más parejas, el público con las peñas como estandarte acude cada tarde al Coliseo y los argumentos triunfales inundan el balance final a modo de trofeos cortados. Ningún día ha bajado la entrada de media plaza, destacando los tres cuartos de ocupación que se registraron el lunes y el pasado sábado.El presente ejercicio que concluyó el sábado se cierra con un saldo de 26 orejas cortadas y un rabo, divididas en y media docena de puertas grandes más la de Juan José Padilla, que no la pudo disfrutar por resultar lesionado. Un balance positivo con una nómina de triunfadores en la que emergen Morenito de Aranda, Sebastian Castella, Enrique Ponce, El Fandi o Daniel Luque. Y entre los rejoneadores, Leonardo Hernández.El final del ciclo del sábado fue todo un acontecimiento. Indulto de un gran toro de Victoriano del Río -‘Decano’-, a cargo de un extraordinario Morenito de Aranda, que paseó las dos orejas y el rabo simbólico. En total, cinco apéndices para el burgalés que firmó una tarde de plenitud.En el broche del abono se jugó una buena corrida de Victoriano del Río a la que le cortó cinco orejas Sebastian Castella que hilvanó tres importantes faenas, cada una con un argumento distinto. Y dos paseó Juan José Padilla del toro que abrió festejo, un animal bravo. Pero el jerezano resultó lesionado y no pudo estoquear su segundo oponente.Artísticamente, la feria la marcó el lunes una gran faena de Enrique Ponce a un toro de Charro de Llen premiado con la vuelta al ruedo. Dos trofeos para el valenciano que puso en solfa su magisterio.Esa misma tarde, El Fandi dejó patente su incontestable seguridad en el triunfo con cuatro trofeos. Esa tarde también, Morenito de Aranda le cortó una oreja al tercero de la tarde, primero de su lote, tras una gran faena que sólo tuvo el lunar de la espada. Armonía y buen gusto del burgalés que toreó con guapeza y ligazón.festejo inauguralEn el festejo inaugural del abono cortó tres orejas y abrió la Puerta Grande un arrollador Daniel Luque, que anduvo sobrado frente al mejor lote de una desigual corrida de Victoriano del Rio. Por segundo año consecutivo, Luque inscribe su nombre entre los triunfadores del abono arandino. El de Gerena buscó las vueltas a sus dos oponentes y les exprimió con la facilidad.Miguel Abellán paseó la oreja del manejable animal que abrió plaza tras una faena eficaz y limpia frente a un toro que tuvo mejores inicios que finales. Y otro trofeo pudo pasear del cuarto de haber acertado con el acero. Iván Fandiño también puntuó a orillas del Duero. Encajado cuando pudo y entregado siempre, Fandiño puso sobre el tapete arandino firmeza, talones y el carácter de buscar siempre el fondo a un lote sin entrega.Envuelto en el ecuador del ciclo, el martes se celebró la corrida de rejones. Tuvo el hándicap de tener que sobrevivir los tres actuantes frente a una corrida de Juan Albarrán que resultó muy mansa y con fuertes querencias a los adentros. Salió a hombros un vibrante y decidido Leonardo Hernández, que anduvo más certero que sus compañeros de terna con el rejón de muerte y cortó un trofeo de cada ejemplar de su lote.Una oreja arrancó Diego Ventura del quinto tras firmar un ejercicio de talento. Abrió función Sergio Galán, que escuchó dos ovaciones tras dar cuenta de un lote pegajoso y deslucido con el que anduvo impecable técnicamente y muy solvente.