BUREBA / SUCESOS
Un muerto y tres heridos en una brutal colisión múltiple en la N-I
Dos furgonetas se quedaron atrapadas entre tres camiones por un frenazo brusco
Los bomberos trabajando para poder excarcelar a los heridos que quedaron atrapados en el interior de los vehículos siniestrados.-G. GONZÁLEZ
BRIVIESCA
La carretera N-I volvió a ser escenario de un brutal accidente de tráfico en el que, al cierre de esta edición, una persona perdió la vida y otras tres resultaron heridas de distinta gravedad.
El siniestro se produjo en el kilómetro 265, término municipal de Santa Olalla de Bureba, a las 19.02 horas cuando un brusco frenazo de un camión desencadenó un choque por alcance en el que se vieron implicados otros dos vehículos pesados y dos furgonetas.
Según los datos recogidos en el lugar del siniestro, el primer camión se detuvo en el carril sentido Burgos impactando contra él una furgoneta que le seguía.
El segundo chófer logró en el último instante desviarse ligeramente a la derecha pese a lo cual aplastó al vehículo ligero llegando a tocar la caja del primer camión.
La cadena de colisiones continuó cuando una furgoneta con matrícula rumana alcanzó de lleno al segundo pesado por detrás siendo así mismo embestida por un tercer pesado que la redujo a una tercera parte de su tamaño.
La violencia de este accidente causó la muerte a una persona que quedó atrapada, al igual que los otros tres heridos, entre los restos de los vehículos ligeros. Al cierre de esta edición se desconocían los datos de filiación del fallecido. Dos de los heridos (uno de ellos de 48 años, otro sin datos) fueron trasladados en UVI móvil, y el tercero, de 56 años, en ambulancia de soporte vital básico, al Complejo Asistencial de Burgos.
Por fortuna otros dos turismos y un cuarto camión que circulaban en el mismo sentido lograron maniobrar para evitar más choques no viéndose afectados directamente en el trágico siniestro.
El elevado número de vehículos implicados movilizó a dos ambulancias UME de Burgos así como a las de Soporte Vital Básico de Briviesca y Belorado con los facultativos del PAC de ambas localidades.
Igualmente se desplazaron al lugar efectivos de los parques de Bomberos de Burgos y Briviesca que tuvieron que emplearse a fondo para rescatar a las víctimas de los restos de los vehículos.
Muy complicado fue el trabajo para la Guardia Civil de Tráfico que acudió al siniestro que cortó la carretera totalmente durante más de dos horas para que actuaran los servicios de emergencias. A las diez de la noche, se abría un paso alternativo para el paso de vehículos.
En el caso de los que circulaban sentido Burgos fueron muchos, especialmente camiones, que optaron por dar la vuelta y utilizar la autopista AP-1 entrando en Briviesca.
Los que tenían su destino hacia Miranda fueron desviados en la medida de lo posible por las carreteras rurales que unen la N-I con Santa Olalla pero sus características solo la hacían apta para turismos.
De hecho la congestión de tráfico llegó en su momento mayor a crear una retención que llegaba hasta la localidad de Castil de Peones. Con esta última víctima la cifra de fallecidos en la N-I este año alcanza las cuatro lo que duplica las registradas durante el pasado año completo.
Cabe recordar que el último informe elaborado por el RACC, dentro del estudio de evaluación de carreteras EuroRAP en España, asignó el Nivel Rojo al tramo burebano de la N-I este año.
Concretamente la divide en dos tramos en cuanto a las posibilidades de que los conductores sufran un accidente grave o mortal siendo el primero, entre Prádanos-Santa Mª Ribarredonda, donde se ha producido un fallecido y el segundo donde se han contabilizado tres.
En el informe se detalla el cálculo de riesgo sobre una media de accidentes graves de 4,3 anuales y una IMD de 8.229 vehículos día.
El único motivo por el cual ninguno de los dos tramos de la N-I se encuentran en la zona negra de riesgo muy elevado responde únicamente al sistema de cálculo utilizado ya que por número de siniestros graves o mortales está entre las diez más peligrosas de España recogidas en el estudio.
Se da la circunstancia que el lugar donde se ha producido este último siniestro es uno de los considerados como de mayor riesgo al estar a pocos metros del lugar el acceso a nivel de Santa María del Invierno. Igualmente el puente ferroviario en cuya cuesta se produjo el choque en cadena carece en su parte alta prácticamente de arcén lo que dificulta aún más cualquier tipo de maniobra evasiva en caso de necesidad.