El Parque de Bomberos actuó en 81 emergencias graves este año

La memoria anual del Parque Municipal de Bomberos de Briviesca muestra un aumento muy notable, por segundo años consecutivo, en la cifra de intervenciones graves, que ascendieron a 81 por las 75 del pasado año. El responsable del parque de la capital burebana y bombero profesional, Jesús Losúa, destacó el incremento de los incendios de los dos últimos años, ya que se ha pasado de 28 en 2013 a 60 este año», siendo los últimos dos forestales en esta semana, «que al ser simultáneos ha obligado a movilizar a casi todos los voluntarios».Así, Losúa alertó del peligro de que los fuegos forestales se disparen durante los próximos meses, «pues las heladas ya han dejado muy reseca la vegetación y si no llueve el riesgo es muy alto». Su preocupación también se extiende a la propia seguridad de las intervenciones en estas fechas, «porque no podemos entrar con un camión de 20 toneladas de intervención urbana en caminos y terrenos blandos», argumentó.Respecto a actuaciones en siniestros graves este año la cifra se ha situado en 19, con dos recates no vinculados al tráfico, manteniendo elevado este apartado de actuaciones. Si se destacó la elevada cifra de accidentes de tractores, inapreciable en los últimos años, que han dejado un fallecido y tres heridos en los cuatro accidentes registrados en lo que va de año.En la lista de intervenciones totales, que suman 407, destacan las realizadas por meteorología adversa con 27 tras las fuertes nevadas de principios del año y la retirada de enjambres que han alcanzado las 13. Precisamente, en ambas situaciones de emergencia, se echó menos uno de los equipamientos solicitado por el parque briviescano desde hace años, y también vinculado al aumento de los incendios en viviendas: un vehículo mixto, bomba y autoescala para el rescate y extinción de incendios e intervenciones en altura.Losúa insiste en que «con este vehículo, de un tamaño acorde al escenario donde ha de trabajar, se garantizará la seguridad de ciudadanos y bomberos en caso de ser utilizado», comentó. En este sentido señala que en el caso de extinción en núcleos rurales, «atacar el fuego desde el tejado es clave para poder controlarlo y evitar su propagación, garantizando así mismo la seguridad de los bomberos durante la extinción».El vehículo que han pedido los bomberos briviescanos resultaría además muy versátil, ya que se podría actuar con él sea cual fuera la situación, al estar dotado de una escalera de cinco alturas (21-23 metros), y depósito de agua suficiente para la primera intervención en caso de incendio.A corto plazo, y enlazando con el continuado aumento de la presencia de enjambres tanto en la capital como en la comarca, esta dotación es ya casi imprescindible, al ser necesario utilizar trajes especialmente diseñados para proteger al profesional contra el avispón asiático.Según los especialistas, los trajes tradicionales frente a usos en apicultura hoy son ineficaces ante los aguijones de esta avispa de mayor tamaño que la autóctona y de gran agresividad, lo que requiere una seguridad extra en trabajos en altura.Hasta la fecha, los voluntarios briviescanos han actuado con trajes estándar y escaleras de mano en estas situaciones, aunque en la comarca habitualmente son los propios apicultores los que retiran los enjambres. Pero el nuevo insecto requiere técnicas y equipos de más seguridad, ya que su picadura causa graves daños que pueden ser mortales, según se ha constatado.