El Correo de Burgos

Eligen a Elena Ramírez nueva alcaldesa de Condado de Treviño

Sustituye a su compañero de partido, Ernesto Argote, quien dimitió como alcalde el pasado día 16 En el Pleno de ayer también dimitió Ignacio Portilla

La corporación treviñesa durante la celebración, el pasado 16 de diciembre, del Pleno en el que Argote hizo efectiva su dimisión como alcalde.-S. O.

La corporación treviñesa durante la celebración, el pasado 16 de diciembre, del Pleno en el que Argote hizo efectiva su dimisión como alcalde.-S. O.

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M. M
Burgos

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Condado de Treviño ya tiene responsable municipal, tras el nombramiento ayer como nueva alcaldesa, de la hasta ahora concejala y teniente alcalde del Ayuntamiento, Elena Ramírez. Sustituye a su compañero en el partido Ciudadanos del Condado, Ernesto Argote, tras dimitir éste de su cargo como alcalde el pasado día 16. «Porque estoy cansado de que las administraciones, de Burgos y Álava sobre todo, sigan sin escuchar las peticiones de mejora de los servicios básicos que desde el Consistorio les hemos trasladado en reiteradas ocasiones», argumentaba semanas atrás, horas antes de hacer efectiva su renuncia.El nombramiento de Ramírez fue apoyado, además de por Ciudadanos del Condado, también por PNV, EH Bildu y Agrupación Electoral Independiente Condado de Treviño. La corporación la configuran Cudadanos del Condado (con 2 concejales) Agrupación Electoral Independiente Condado de Treviño (2), PP (2), Bildu (1), PNV (1) y Condado para Todos (1).Si bien el nombramiento de Ramírez resultó ser ayer una sorpresa -pues hasta el 3 de enero no se había fechado la celebración del siguiente Pleno en el que reorganizar la descabezada corporación-, a la novedad de su elección se sumó ayer otra: la dimisión del también concejal Ignacio Portilla -miembro de Agrupación Electoral Independiente Condado de Treviño-, quien ocupó la Alcaldía precediendo a Argote.Como confesaba Portilla, su intención fue continuar con los pasos dados por Argote hace apenas 15 días, pues confiesa compartir la creencia de Argote de que como refuerzo en dicha medida de presión deberían haberle seguido el resto de concejales, mostrando de esta forma un hartazgo generalizado ante la pasividad de las administraciones, y presionar así a Álava y Burgos para reconsiderar sus respectivas posturas.Respuesta en opinión de Argote «nula desde ambas provincias», lo que hizo que se decidiera a abandonar la Alcaldía. «Que no la corporación, donde seguiré peleando como concejal por todos aquellos que nos dieron la mayoría a Ciudadanos del Condado». Asegura que aunque en el pasado Pleno sus compañeros prefirieron seguir ahí, «al entender que Treviño quedaba sino desgobernado -postura que respeto-, la elección de Elena creo que es beneficiosa para los treviñeses».Argote ya hizo pública su intención de dimitir a finales de verano, decisión que tras meditar y reunirse con responsables alaveses -«a quienes trasladamos informes sobre las necesidades de los treviñeses»-, decidió dejar apartada, con el fin de ver la respuesta que se daba a sus peticiones desde Burgos y Álava. «Mi renuncia fue fruto de esa falta de respuesta», aseguró Argote.

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