El letrado de Mauricia reclama hoy la vuelta de su hija a España en una vista cerrada
La mujer que dio a luz a mellizos el mes pasado con 64 años perdió la custodia de la menor
Todavía no sabe si le dejarán hacerse cargo de sus mellizos nacidos el mes pasado, pero Mauricia I.A., de 64 años y vecina de Palacios de la Sierra, tiene ahora ante sí otro reto por delante: que su otra hija, de seis años, regrese a España para afianzar su relación materno-filial después de perder su custodia en 2014 por «desamparo». Y es que la menor reside actualmente en Canadá bajo un régimen de acogimiento familiar que la Audiencia Provincial acabó desestimando hace dos años.El recurso de apelación presentado por su abogado, Juan Carlos Saiz Nicolás, ha dado lugar a una vista que se celebra hoy en el Palacio de Justicia. Al tratarse de un proceso en el que hay una menor de edad involucrada, se celebrará a puerta cerrada.La propuesta de que la hija de Mauricia se trasladase a Canadá con dos primos maternos se basó en el «vínculo afectivo existente y la relación previa y positiva de la menor» con ellos, tal y como recoge la sentencia que desestimó el recurso de Mauricia, en julio de 2015, para recuperar la custodia de la pequeña.A pesar de la decisión que adoptó a posteriori la Audiencia Provincial, la niña no ha regresado a España, por lo que el letrado tratará de argumentar la necesidad de que pueda retomar el contacto con su madre y se ejecute de una vez por todas la anulación del acogimiento familiar que en su día planteó la Gerencia Territorial de Servicios Sociales.Entre los hechos probatorios que llevaron a Mauricia a perder la custodia de su hija figuran los informes de los trabajadores sociales responsables del Programa de Intervención Familiar de la Diputación Provincial. Durante el seguimiento, los técnicos manifestaron la «falta de colaboración de la madre en reiteradas ocasiones» y la aparición de determinados «factores de riesgo».Por ejemplo, se detectaron síntomas de «maltrato psíquico» ante el «aislamiento» y la «escasa interacción con iguales» al que se veía sometida la menor. Dentro del hogar, también se informó de una «falta importante de atención en momentos determinados» que provocó una «privación de aprendizajes y relaciones sociales propias de la edad». Además, el «vestido inadecuado» y la «higiene deficitaria» también jugaron en contra de Mauricia, quien por otra parte demostró -según los informes aportados- un «comportamiento asocial» y «escasa conciencia del problema».Mauricia alegó que actuaba «correctamente» como madre y su defensa aportó los testimonios de un pediatra que no apreció «ningún síntoma de falta de cuidado» en sus revisiones periódicas y de la alcaldesa de Palacios, quien hizo hincapié en la «mejoría en las relaciones sociales de la menor en el pueblo».Al margen de lo que suceda hoy en la vista, la madre sexagenaria es consciente de que la historia podría volver a repetirse, ya que los servicios sociales de la Junta y de la Diputación iniciaron un seguimiento tras el nacimiento de los mellizos.