El Correo de Burgos

Rico cree que Nuclenor debe definirse «lo antes posible»

El presidente provincial sostiene que la reapertura de Garoña es una decisión «meramente empresarial» y apuesta por un plan «complementario, no alternativo»

El presidente de la Diputación Provincial, César Rico.-SANTI OTERO

El presidente de la Diputación Provincial, César Rico.-SANTI OTERO

Burgos

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Para el presidente de la Diputación Provincial, César Rico, la pelota de Garoña se encuentra ahora mismo en el tejado de Nuclenor, cuya respuesta debería llegar «lo antes posible» para «dar certidumbre» a los trabajadores de la central y «marcar cuál es el itinerario posterior». Lo que vino a decir, en definitiva, es que el Gobierno de Mariano Rajoy ha cumplido su cometido al revocar el «cierre político» que impulsó José Luis Rodríguez Zapatero y ofrecer la «posibilidad» a Endesa e Iberdrola de seguir operando «con el aval del Consejo Nacional de Seguridad Nuclear». Por lo tanto, el futuro de la planta depende, a su juicio, de una «decisión meramente empresarial».En lo que respecta al actual cruce de planteamientos entre ambas eléctricas, el mandatario provincial apostó por «dejar la puerta abierta» para que las «dificultades empresariales se arreglen» y «la central pueda seguir operando». No obstante, mostró sus reservas sobre la posibilidad de reducir la carga fiscal porque «la normativa europea prohibe incentivar determinadas actividades por parte del Estado». Aún con todo, precisó que se podría suscribir un «acuerdo de colaboración» vía «impuestos» o a través de «otros mecanismos de ayuda económica».Sea como fuere, Rico añadió que las empresas tienen que «valorar la rentabilidad económica en el momento actual sin pensar en posibles ayudas», pues una compañía que basa su actividad «solamente en subvenciones» está abocada al «fracaso tarde o temprano».Aunque el escenario de la reapertura parece cada vez más inestable, el presidente de la Diputación se autodefinió como «optimista por naturaleza» dada su esperanza en que no sea necesario impulsar un plan de reactivación económica en la zona. «Siempre hemos creído en un plan complementario, no alternativo», esgrimió a sabiendas de que la Junta de Castilla y León ya se plantea un futuro post-Garoña mientras trata de convencer a Endesa e Iberdrola de que inviertan en las tres comarcas del entorno si finalmente deciden bajarse del barco.A este respecto, afirmó que el planteamiento de la consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, sobre la necesidad de contar con un «plan B» por lo que pueda pasar supone una «buena iniciativa». Sea como fuere, recordó que el cierre «no significa que de la noche a la mañana la central desaparezca», ya que su desmantelamiento conllevará «mucho tiempo de trabajo».«Trilerismo y pirateo»Aparte de exigir una vez más el cierre definitivo de la planta e instar a Nuclenor a solicitar su desmantelamiento, la secretaria provincial del PSOE, Esther Peña, indicó que la decisión no depende de las eléctricas sino del Ejecutivo de Rajoy, al que conminó a «cerrar una planta peligrosa y envejecida e implantar un plan especial de reactivación económica conforme a la propuesta que los socialistas ya hemos puesto encima de la mesa».Asimismo, Peña criticó los «años de trilerismo, de trolas y de pirateo» del Partido Popular en el culebrón Garoña e insistió en que el Gobierno no puede «perder más el tiempo» ni «tomar una decisión enfunción de los intereses de las grandes empresas titulares de la nuclear, sino en función del interés general».Por su parte, el senador del PSOE por Burgos, Ander Gil, advirtió que «no sería descartable que alguien pudiera emprender acciones legales ante los indicios de prevaricación que parecen salpicar el proceder regulador ‘ad hoc’ del CSN con Garoña». Además, aseguró que el equipo de Rajoy tiene ante sí una «oportunidad única para aparcar su apuesta ideológica» que hasta el momento solo ha servido de «de buque rompehielos para el resto de las centrales nucleares españolas».«Para hacérselo mirar»«Da la sensación de que se han puesto de acuerdo». Con estas palabras, el portavoz provincial de Imagina Burgos, Marco Antonio Manjón se mostró convencido de que Endesa e Iberdrola pretenden presionar al Gobierno porque en realidad buscan «un visto bueno de la ampliación». Sin embargo, opinó que doblar la vida útil de la planta «es para hacérselo mirar», máxime cuando «el 90% de la gente, salvo el PP, está convencida de la irresponsabilidad de la reapertura».Mientras tanto, el alcalde de Valle de Zamanzas, Juan José Asensio, pidió al Ejecutivo que «se moje», amén de considerar que la estrategia de Endesa en estos momentos pasa por «retener la posición de Iberdrola».

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