Tordómar compra y arregla la casa parroquial para evitar su ruina
Así lo acordaron Consistorio y Arzobispado tras salir a subasta y quedar desierta / También se ha limpiado una escombrera ilegal junto al río, que en 2018 se recuperará como paseo
El proyecto básico buscará consolidar la estructura.-ECB
El Ayuntamiento de Tordómar tiene ya sobre la mesa un proyecto más como será la compra de la casa parroquial «con el fin de evitar que termine convertida en una ruina por completo, y de paso hacer un pequeño proyecto de reforma que nos permita darle más adelante un uso», explica la alcaldesa de la localidad, Inma Sierra. Añade que la compra, que supondrá a las arcas municipales unos 6.000 euros, es el fruto de las conversaciones mantenidas con el Arzobispado de Burgos. Proceso en el que la casa ya salió a subasta «sin que hubiera nadie interesado en ella, por lo que finalmente será el Ayuntamiento el que se hará cargo, quedando sólo pasar por notaría para hacer efectiva dicha venta», comenta la edil.Detalla que debido a su estado, «medianamente firme en el exterior pero mucho más inestable en su interior, lo primero que habrá que hacer es consolidarla, para lo que se elaborará un proyecto básico mientras se barajan usos posteriores que darle, que los habrá».El equipo de Gobierno sigue así, en su tónica habitual de ir realizando pequeños proyectos con los que asegurar los servicios básicos a los poco más de 300 vecinos censados, «y que en verano se convierten en cerca de 700», cifra. Asegura que aunque poco pueden hacer con el presupuesto anual que barajan -y que se mantiene estable en torno a los 360.000 euros- «el deseo es controlar el gasto y emplearlo de forma racional para contar con la menor carga impositiva para los vecinos, dejando que el dinero de los tordomeños siga en sus bolsillos, si puede ser»,. Aunque sin descartar una futura subida de los impuestos, «que no contemplamos pero llevaríamos a cabo si fuera necesario», insiste. Pone como ejemplo el abastecimiento de agua, «para el que no falta la vigilancia exhaustiva de las bombas y circuitos, así como labores de limpieza y reparaciones continuas para evitar problemas futuros». Además de las mejoras en la pavimentación y el alumbrado de la localidad.Servicios a los que la alcaldesa este año une el arreglo que se ha realizado, de un edificio en malas condiciones «que se ha tirado y levantado uno nuevo como almacén municipal con un coste de 50.000 euros, «que sólo nos falta ‘vestir’ por dentro, todo ello con los planes provinciales». Mejora que se completa con la realizada en una zona junto al río que se utilizaba hasta ahora como escombrera ilegal, lo que nos ha costado unos 12.000 euros», detalla. Recuperación que el próximo año continuará con el plantado de árboles, y que permitirá que sea acondicionada como zona de paseo, «ya que proyectos no faltan, pero para el próximo año».