La Concejalía de Juventud no se trasladará al edificio de El Molino

La alcaldesa de Aranda, Raquel González, confirmó minutos antes de terminar el último pleno que la Concejalía de Juventud no se trasladará al edificio de El Molino. Atrás queda el anuncio del portavoz del equipo de Gobierno, Emilio Berzosa, en octubre de 2016 o las declaraciones en las que, hace apenas un mes, la concejala de Juventud, Marian Marín, aseguraba en la cadena Cope que el traslado se realizaría de forma inminente. La máxima responsable del Ayuntamiento lo dejó muy claro: «no hay ningún acuerdo al respecto ni en comisión ni en órgano ejecutivo».Y es que, con la previsible adquisición del Centro de Acción Social (CEAS) de la calle Agustina de Aragón, las necesidades han cambiado. En este sentido, cabe recordar que a raíz de una propuesta de Ciudadanos, el Ayuntamiento barajó la posibilidad de trasladar el CEAS -para ahorrar el alquiler- a la actual Casa de la Juventud y llevar la Concejalía al edificio del Molino. Ahora, la realidad no obliga a tanto cambio y si la Casa de la Juventud mantiene su ubicación, el edificio del Molino -vacío tras la marcha de la sede de la Indicación Geográfica Protegida (IGP) Lechazo- podría albergar otro proyecto.Sobre la mesa, una propuesta de la asociación arandina ‘El Puente’ para crear en el edificio de El Molino y su anexo -futuro centro de Arte Joven- un espacio de emprendimiento social y cultural dirigido a la ciudadanía en general y a los jóvenes en particular. Un espacio de coworking -que no un vivero-, como el que la asociación El Hueco tiene en Soria, en el que tendrían cabida todo tipo de proyectos relacionados con la cultura y el emprendimiento social. «Queremos unir talento para crear más talento y tenemos mucha fe en que van a llegar muchas cosas», explicó la portavoz del colectivo, Susana Cebrián, convencida de que este tipo de iniciativas no solo favorecen las sinergias, sino que también evitan la despoblación. «Queremos escuchar a la juventud y creemos que esto es el futuro», apostilló.A la espera de presentar el proyecto al resto de grupos de la oposición -no asistieron a la reunión en Alcaldía-, la asociación insistió en la importancia de lograr el respaldo unánime de la Corporación para que sea un proyecto estable. Dicho esto, sus integrantes aclararon que el Ayuntamiento cederá el espacio, pero la gestión «será privada». «Al no tener ánimo de lucro, los beneficios revertirán en la ciudadanía», garantizó el colectivo.En mente, muchas actividades como conciertos, programas formativos, exposiciones y en definitiva, alternativas de ocio. «Queremos crear», animaba la portavoz de un colectivo que ha recabado el apoyo de asociaciones como Art de Troya y respaldo de la alcaldesa. «Nos parece una iniciativa muy interesante», recalcó González.A la espera de conocer dicho proyecto, la oposición no esconde sus dudas. «En el edificio del Molino se ha hecho una obra en función de unas necesidades y ahora cambian su destino. Nos parece una gestión poco eficiente», criticó el portavoz de Ciudadanos, Francisco Hontoria. «Aquí la alcaldesa cambia las cosas como si jugara al dominó», reprochó la concejala socialista Leonisa Ull.