Caja Rural renueva su línea de ayudas para universitarios

La Fundación Caja Rural de Burgos reafirmó ayer su compromiso con la formación académica de carácter agroindustrial renovando el convenio de colaboración, por valor de 6.000 euros, para la concesión de becas, de entre 300 y 600 euros, a socios o hijos de socios que tengan intención de cursar el Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural de la Universidad de Burgos (UBU).Según detalló el presidente de la Fundación, Pedro García Romera, esta subvención sirve para luchar contra la despoblación al «promover estudios para que la gente pueda estar en el campo». En la misma línea, el rector de la UBU, Manuel Pérez Mateos, hizo hincapié en la apuesta «pionera» de Burgos «a nivel nacional» a la hora de implantar estudios relacionados con la ingeniería agrolimentaria que se complementan con dos másteres relacionados con Bioseguridad y Biotecnología Alimentarias y Cultura del Vino y Enoturismo.La principal novedad del presente convenio, tal y como explicó García Romera, es la creación de unas «bolsas de ayudas» de 500 euros -con un máximo de seis- para los alumnos que realicen prácticas en empresas o cooperativas asociadas a Caja Viva Caja Rural. Asimismo, si las líneas anteriores no cubriesen el total del importe consignado, la entidad destinaría la partida sobrante a la concesión de un premio para el estudiante o becario que presente el mejor proyecto de investigación en el ámbito agroalimentario.El reparto de las ayudas correrá a cargo de un comité seleccionador que valorará el nivel de renta familiar y el expediente académico de los posibles beneficiarios. SegúnPérez Mateos, se prevé que la subvención llegue a unos 10 o 15 estudiantes de la UBU.