Las trabas burocráticas frenan la Escuela de Panificación en el Ctacyl

Pese a no descartarlo en el futuro si resulta viable, el consejero de Educación, Fernando Rey, aseguró ayer en Aranda de Duero que la Escuela de Panificación que San Gabriel puso en marcha este año con el apoyo de la Consejería de Empleo no podrá seguir el curso que viene, al menos de manera concertada y en el Centro Tecnológico Agrario Tomás Pascual (Ctacyl). Y es que pese a ser uno de los proyectos con los que los gabrielistas pensaban dar contenido al edificio al no contar con la autorización de centro educativo, los trámites burocráticos serán largos y «no es fácil», admitió Rey.Otro problema es el dinero. Aunque se está barajando la posibilidad de que la Consejería de Agricultura conceda una ayuda para que se pueda retomar, al menos de forma temporal; el consejero subrayó la importancia de estudiar la demanda para evitar errores, como cuando en Guijuelo (Salamanca) se decidió hacer un ciclo de FP ligado a la charcutería que no contó con ningún alumno porque eran contratados sin tener que pasar por la formación.«Antes de tener ciclos de FP, que son caros, o de concertar, tenemos que analizar la demanda de alumnos y que sea sostenible en el tiempo», argumentó convencido de que, en este caso, el sector lo está pidiendo y puede ser además una de las claves para que San Gabriel siga asumiendo la gestión del Ctacyl, tal y como solicitó la consejera de Agricultura, Milagros Marcos.La ponencia que el consejero dio dentro del curso Prensa y Poder se centró en la renovación que las nuevas tecnologías aportan en la Educación. Durante su charla, Rey hizo hincapié en la escuela digital y en los retos que traerá como la formación del profesorado. También analizó el programa estatal de escuelas conectadas y lamentó que mientras el primer paquete de Comunidades Autónomas tuvo la conexión gratis, el segundo, donde se encuentra Castilla y León y Madrid, tienen que pagar «hasta 16 millones de euros».La conexión ultrarrápida llegará a todos los municipios de la región y conectará a las escuelas rurales a partir del curso 2019-2020. «Nos va a obligar a cambiar los métodos y las pedagogías», advirtió el consejero.