Diego Clemente promete una «visión científica» sobre el orgullo de ser mirandés

Aunque Diego Clemente no lo crea, era cuestión de tiempo que Aitana Hernando le llamase para proponerle como pregonero de las Fiestas de Altamira. El caso es que la alcaldesa de Miranda de Ebro le envió un whatsapp en primer lugar y el lunes, por fin, aceptó el reto con «ilusión» pese a considerar que no se lo merece.La confesión, a priori, podría interpretarse como una declaración de «falsa modestia»por su parte. Nada más lejos de la realidad. «Estoy en el inicio de mi carrera profesional», asegura este joven investigador, experto en neurociencia, que ha conseguido frenar el avance de la esclerosis múltiple en ratones. Sin embargo, es consciente de que «todavía me quedan muchas cosas por conseguir».Una de las razones que motivaron el ‘sí’ al ofrecimiento de Hernando fue la petición expresa de la Asociación Burgalesa de Esclerosis Múltiple (Asbem). Cuando se enteró no tuvo «ninguna duda» y decidió aceptar el cargo de pregonero con el objetivo de «visibilizar la labor de los científicos» para que la ciudadanía entienda lo «importante» que resultan sus investigaciones a la hora de combatir enfermedades que, en principio, se dan -o daban- por incurables.Al mismo tiempo, Clemente ahondará en la cuestión identitaria de sus paisanos. A través de una «visión científica» cuya fórmula explorará de aquí al día del pregón, pretende responder a una pregunta que toda la ciudad se ha planteado en más de una ocasión: ¿Por qué las personas de Miranda se siente orgullosas de ser de Miranda? A la espera de sus conclusiones, lo cierto es que la hipótesis no puede ser más acertada.Al margen del contenido de su discurso, el biólogo mirandés ya se ha visto algún que otro vídeo en Youtube para tomar nota de sus antecesores. De entrada, cuando recibió la llamada de la regidora, no pensó en el miedo escénico de quien se sabe protagonista de una cita multitudinaria. No en vano, ayer comenzó a sentir «algo de vértigo» tras el anuncio oficial de su nombramiento. Su teléfono no dejaba de sonar y los mensajes a través de Whatsapp o de sus redes sociales le hicieron percatarse de la responsabilidad que tiene por delante. Aún con todo, Clemente no se achanta porque lo prometido es deuda..Investigación continuaMientras aguarda la llegada de septiembre para reencontrarse con su gente, el investigador mirandés sigue enfrascado en su lucha contra la esclerosis múltiple desde el Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo. El problema, como siempre, es la falta de financiación para avanzar en su revolucionaria investigación.Afortunadamente, su equipo se ha beneficiado recientemente de una convocatoria a nivel nacional a la que optaban 562 proyectos de investigación científica. Su iniciativa, en el número 12 del ranking, recibirá una ayuda de 250.310 euros. Gracias a esta dotación, el futuro pregonero de las fiestas de Altamira celebra que dispondrá de tres años para «trabajar holgadamente».Como bien dice Clemente, todavía queda mucho camino por recorrer. Obviamente, su prioridad pasa por detener el avance de la enfermedad en personas. El proceso resulta muy complejo y requiere una inversión de millones de euros para lograrlo. Y claro, ahí entran en juego tanto las administraciones públicas como las compañías farmacéuticas. Entretanto, este prometedor científico continúa su impagable labor sin perder la esperanza en que la esclerosis, algún día, sea cosa del pasado.