El tejido industrial de Aranda apoya la reapertura del Directo

Mientras a nivel político el futuro del tren depende de continuos informes de viabilidad, el sector industrial tiene muy claro que la reapertura del Directo y la conexión con Madrid como puerta al sur penin sular y al Mediterráneo es fundamental para impulsar sus negocios. Y es que el ahorro que ofrece el transporte ferroviario en comparación con la carretera es demasiado importante como para no tenerlo en cuenta. También lo es el ahorro kilométrico que ofrece el Directo frente a otras alternativas como Valladolid. «Galvaranda viene porque hay un ramal y un tren», aseguran fuentes muy cercanas al proyecto, en alusión a la nueva empresa que comenzará a funcionar en el polígono Prado Marina a finales de 2019. Su puesta en marcha, tal como adelantó este periódico en primicia, conllevará la creación de 70 puestos de trabajo.El panorama actual así lo requiere. «Ahora es imposible pensar que se pueda repetir la situación que se dio hace 10 años, cuando las empresas se instalaron sin que el ramal estuviese operativo», señalan. Lo cierto es que, desde que la Junta de Castilla y León construyó esta infraestructura con una inversión que rondó los 3,5 millones de euros, el ramal ha jugado un papel clave a la hora de nutrir a estas empresas de la materia prima que necesitan para producir sus productos.Desde que se acondicionó en 2016, las tres empresas que lo utilizan (Todoaceros, Aranda Coated Solutions y Tubos Aranda) han incrementado progresivamente el número de toneladas transportadas hasta superar las 530.000 desde la activación. «Nosotros terminaremos el año con 110.000 toneladas, 20.117 más que el año anterior», explica desde Tubos Aranda la directora adjunta, Elena Martín. Su empresa transporta a día de hoy el 50% de las mercancías de los cinco trenes que circulan cada semana en estos momentos.Las previsiones darán un salto cuantitativo en 2020 con Galvaranda, que incrementará en un 100% el número de trenes que llegan desde el puerto de Bilbao. Se pasará así de 220.000 toneladas al año a 400.000.Esperando la licenciaPor el momento, Galvaranda espera la licencia municipal para empezar la obra. La iniciativa empresarial nace del interés inversor común de accionistas de Todoaceros y Aranda Coated Solutions y cobrará forma en el mismo polígono Prado Marina como pieza estratégica. Su apertura completará a las otras dos industrias. Mientras Todoaceros está especializada en el decapado de bobinas de acero -sin ácido ni aceite- y Aranda Coated Solutions destaca como productor internacional de bobinas de acero prepintado de alta calidad; Galvaranda se concentrará en los pedidos que requieran bobinas de acero galvanizado, un proceso que aporta resistencia ante la corrosión y permite usar en intemperie o condiciones climáticas críticas gracias a un recubrimiento de acero mediante una capa de zinc.Sin querer entrar en detalles para no dar pistas a la competencia, hay dos cosas que sí se pueden adelantar: la fábrica necesitará una dimensión grande y también una inversión muy importante.Para este núcleo del acero tan significativo en Castilla y León, que se completa con Tubos Aranda y las torres eólicas de Tecnoaranda, la conexión con Madrid abriría un nuevo abanico de posibilidades.