Más de 250 kilos de ‘speed’ incautados en el último año

De un tiempo a esta parte, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado vienen detectando un «aumento del consumo de ‘speed’ dentro de la población juvenil». No es por ello de extrañar que tanto la Guardia Civil como la Policía Nacional hayan decidido redoblar esfuerzos con el objetivo de neutralizar la venta al por mayor y, por ende, el menudeo en la calle. En poco más de un año, los operativos desplegados en la provincia han permitido decomisar más de 250 gramos de una sustancia «peligrosísima» y «más barata que la mayoría» de drogas estimulantes.El último golpe al tráfico de sulfato de anfetamina tuvo lugar recientemente en Aranda de Duero. Dos hombres de nacionalidad española (A.R.C., de 53 años, y C.S.M., de 58), viejos conocidos de la Policía Nacional por antecedentes similares, fueron detenidos en la capital ribereña en posesión de 15 kilogramos de ‘speed’, 660 de hachís y 74 de marihuana. Gracias a la denominada ‘Operación Gasolina’, la Policía Nacional ha sacado del mercado, como mínimo, 60.000 dosis con un valor estimado de 670.000 euros, tal y como precisaba ayer la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones.La investigación, coordinada entre las comisarías de Burgos y Aranda, se inició el pasado mes de diciembre a raíz de los sospechosos movimientos de uno de los detenidos. No tardaron mucho los agentes en comprobar que esta persona se encargaba de almacenar y custodiar la droga en un lugar «difícil de encontrar», concretamente una nave ubicada en un bloque de viviendas dentro de una «zona perimetral» de la ciudad. Los vecinos, según detalló el inspector jefe de la Policía Nacional de Aranda, Joaquín Gomá, «no sospechaban nada» porque en un local de estas características la entrada y salida de coches o mercancías no suele llamar la atención.Una vez confirmadas las sospechas, los agentes procedieron a la detención del transportista cuando iba a realizar la entrega de una «considerable cantidad» de ‘speed’. A continuación, una vez obtenida la pertinente autorización judicial, la Unidad de Guías Caninos de la Policía Nacional registró en profundidad la nave hasta dar con el resto de sustancias que se almacenaban para su posterior venta al por menor.Esa es al menos la hipótesis que se baraja porque no se localizaron «adulterantes ni otros precursores» que sugieran que los dos detenidos se encargasen de dicha labor, precisó el comisario jefe provincial de Operaciones de la Comisaría Provincial de Burgos, Félix López. En cualquier caso, aseguró que se ha «desmantelado la parte importante de la organización que se dedica al tráfico al por mayor». Gracias a ello, se mostró convencido de que «hay gente que no ha vuelto a consumir» y «gente que nunca va consumir por primera vez».Aunque de entrada se estima que el material incautado pudiera rondar las 60.000 dosis en términos de ‘trapicheo’, López reconoció que aún no se conocen los resultados de los análisis químicos para determinar el porcentaje de «principio activo» del ‘speed’ aprehendido. Así pues, recordó que muchos traficantes optan por mezclar la droga con otras sustancias para «ganar mucho dinero», de ahí que en ocasiones los consumidores «compran algo que no lleva ni el principio activo» o es «muy escaso».Lo importante ahora mismo, a juicio de Barcones, es que el «celo y profesionalidad» de los agentes que participaron en este operativo ha permitido «defender a la población de los desaprensivos que se lucran a costa de atentar contra la salud pública de la ciudadanía». Asimismo, reiteró que el sulfato de anfetamina causa estragos entre sus consumidores debido a su «poderoso efecto adictivo» y los efectos que acaba provocando a la larga. Por ejemplo, «ataques de pánico, crisis de ansiedad, convulsiones, daños cerebrales y alteraciones psicopatológicas similares a las de la esquizofrenia».El auge de esta droga entre los jóvenes es una realidad que no se le escapa a la subdelegada, quien ya el pasado mes de noviembre advertía sobre el repunte del consumo tras el cierre de la ‘Operación Dulzaina’, que en poco más de un mes permitió la detención de cinco personas y el decomiso de más de 90 kilos. Fue, sin lugar a dudas, el varapalo más grande para los traficantes de esta sustancia durante el último año. No obstante, desde febrero de 2018, la Policía Nacional y la Guardia Civil de Burgos han intervenido en distintos operativos -inclusive a nivel interprovincial- con resultados positivos. El último, a principios de enero de este año, supuso el desmantelamiento de una banda de cuatro hombres y cuatro mujeres, de entre 23 y 51 años, con 85 gramos de ‘speed’, 50 de cocaína, 20 de marihuana y 10 de hachís para su venta en Burgos y Asturias.