Cs teme que la rebaja de remanentes afecte a Clunia

Con las elecciones generales aún recientes y las municipales en apenas tres semanas, se esperaba ayer un pleno provincial con las bancadas de cada formación encendidas por los resultados pasados y futuros. Al final no fue para tanto y la mayor parte del debate se centró en la modificación del remanente, con una rebaja de 1,5 millones de euros, aprobado por el Partido Popular valiéndose de su mayoría absoluta en la Diputación.La discusión en torno a este asunto surgió tras el voto en contra de Ciudadanos. Su portavoz en la Institución Provincial, Lorenzo Rodríguez, criticó a los ‘populares’ por asegurar que «no se podían hacer modificaciones» en su presupuesto, amén de añadir que en el capítulo de Personal «no se han calculado las resoluciones de las retribuciones», lo que a su juicio causará dificultades a la hora de afrontar los pagos porque «nos han dejado los remanentes con muy poco dinero».Rodríguez también se mostró preocupado por el futuro de Clunia teniendo en cuenta que las actuaciones contempladas en el proyecto de consolidación de la ciudad romana rondan los 2,5 millones y «la partida es de 800.000 euros». Partiendo de esa base, el portavoz de Cs consideró que la Diputación no podrá costear la obra «si la empresa la ejecuta este año». Asimismo, subrayó que a «este ritmo» la partida para intervenciones de urgencia no se podrá consignar «a partir de mayo». En su opinión, la gestión económica del equipo de Gobierno en este sentido no permitirá asegurar un «futuro a los pueblos ni dar más oportunidades».En respuesta a las acusaciones de Rodríguez, el vicepresidente de la Corporación Provincial, José María Martínez, justificó la necesidad de realizar los «ajustes correspondientes» sobre el remanente inicial de 4,8 millones de euros para habilitar partidas que no estaban contempladas en el primer borrador presupuestario. Sobre Clunia, trató de tranquilizar a Rodríguez al precisar que existe un «plazo amplio» y que la dotación prevista es «suficiente» para poder atender las certificaciones que se vayan produciendo».Martínez no dudó en sacar pecho al recordar que la deuda de la Diputación rondaba el 80% cuando César Rico asumió la Presidencia en 2011 mientras que ahora se acerca al 40%. No obstante, Rodríguez insistió en que los ‘populares’ han «hipotecado» el futuro de la Corporación porque «veían la salida cerca», en clara alusión a los próximos comicios. Y aunque reconoció la reducción de la deuda, remarcó que el principal motivo reside en el rechazo al préstamo de 14 millones de euros que finalmente no se consiguió porque «el plan financiero de estabilidad no lo permite».El ambiente se caldeó cuando el portavoz del equipo de Gobierno, Borja Suárez, acusó a Rodríguez de «mezclarlo todo en la batidora» con la intención de dar un «mitin» pese a que «la situación financiera es mucho mejor que hace cuatro años». Acto seguido, calificó de «sarta de sandeces» los argumentos del diputado de Cs, decidido a «confundir a la opinión pública» obviando las «economías saneadas» en la «mayoría» de las corporaciones locales de la provincia.Respecto a los augurios de Rodríguez sobre el próximo reparto de escaños tras las municipales, Suárez indicó que resulta «peligroso en política vender la piel del oso antes de cazarlo» aunque «vea al animal herido enfrente».