El Correo de Burgos

DIPUTACIÓN PROVINCIAL

Rico aboga «por el consenso y el diálogo, porque aquí no sobra nadie»

El popular aseguró que será la línea del nuevo mandato al frente de la Diputación que ayer inició, tras el acuerdo logrado con Cs para gobernar la Institución de la que forma parte también Vox

Foto de familia de los 25 diputados provinciales que configuran la actual corporación provincial que presidirá, nuevamente, el popular César Rico (centro de la imagen).-R. O.

Foto de familia de los 25 diputados provinciales que configuran la actual corporación provincial que presidirá, nuevamente, el popular César Rico (centro de la imagen).-R. O.

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M. M.
Burgos

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El candidato del Partido Popular César Rico, renovó su cargo de presidente de la Diputación Provincial gracias a los 14 votos a favor emitidos por el PP, Ciudadanos y Vox, venciendo así al candidato socialista David Jurado y soslayando las líneas rojas de la formación naranja para cerrar el pacto. Cs pidió primero que quedasen fuera quienes llevasen ocho años o más en el cargo, como es el caso de Rico y, luego reclamó para sí l presidencia. Ni una cosa ni otra. Finalmente Rico sigue al frente, atado, eso sí, a un pacto de 66 puntos a la formación naranja que se ofreció a compartir con Vox y el PSOE, encastillado en calificar de «fraude» el pacto de PP y Cs.Rico defendió el consenso «legítimo, democrático y transparente» alcanzado entre el PP y Cs, mientras se mostraba dispuesto a «tender la mano» al resto de formaciones con representación provincial. «No sobra nadie, todos tenemos que empujar», enfatizó tras comprometerse a liderar un equipo de Gobierno «eficaz» para sacar adelante las 66 actuaciones planteadas por la formación naranja como condición indispensable para suscribir el pacto.Rico también hizo hincapié en la necesidad de desarrollar cuanto antes un nuevo Plan Estratégico Burgos Rural ante el fin del actual el año que viene, «sobre todo tras los buenos resultados cosechados este lustro, que hace que el objetivo del equipo de Gobierno pase por apuntalar esta piedra angular. Y para ello, apeló a la colaboración del tejido socioeconómico de la provincia y de los partidos políticos, a los que también solicitó el mantenimiento de aquellos debates «serenos y serios» que marcaron la anterior legislatura.Como era de esperar, el portavoz del PSOE en la Diputación, David Jurado, planteó un discurso muy crítico con el «fraude político» que a su juicio ha propiciado Cs al apoyar un Gobierno del PP, «con el único objetivo de cambiarlo todo para que nada cambien». En este sentido, remarcó que el cambio que promete la formación naranja «no existe ya que no se cambia nada apuntalando a quien lleva toda la vida gobernando esta Institución». Además, «los tres corporativos de Cs serán rehenes de las actuaciones que tanto afeaban al PP durante la anterior legislatura».Tirando de hemeroteca, Jurado recordó la abstención de Cs en la pasada investidura de Rico alegando entonces que esa figura «debe proceder de pueblos que no superen los 20.000 habitantes». Asimismo, reprochó a Rodríguez defender tiempo atrás las «dos legislaturas como máximo» para cualquier diputado provincial y con ello evitar «vicios y apoltronamientos no deseados». «Señor Rodríguez, ¿conoce usted al señor Rico? ¿Lo ha conocido hoy? ¿Dónde han quedado sus famosas líneas rojas?». Batería de preguntas retóricas con las que el portavoz socialista lamentó que Cs haya «perdido la palabra» a cambio de un «sillón», además de «convertir el agua en vino, y de hacer de dos minorías una mayoría».

Tampoco desaprovechó la ocasión Jurado para expresar nuevamente su malestar por el «cambio de cromos» que «se ha pactado lejos» de una provincia que «forma parte de un gran tablero de juego a nivel nacional, en el que solo participan las direcciones de ambos partidos, y en el que nuestras instituciones locales y autonómicas han sido monedas de cambio». Por todo ello se comprometió a liderar una oposición de «progreso» para «provocar el cambio» que Burgos necesita «antes de que se acaben las oportunidades», porque parafraseando a Miguel de Unamuno aseguró que «los populares y naranjas han vendido, pero no han convencido».Primer Pleno

Nuevas caras, nuevos partidos...¡y el calor sofocante de siempre en el Salón de Plenos! Éstas fueron algunas de las notas que marcaron la jornada de ayer en la Institución Provincial, en la que se celebró la toma de posesión de sus cargos por parte de los 25 diputados que la configurarán los próximos 4 años: 11 bajo las siglas del PSOE (María del Mar Alcalde, Isaac Angulo, Antonio Arauzo, Montserrat Cantera, Ignacio Grajal, Francisco Javier Lezcano, Alexander Jiménez, David Jurado, Jaime Martínez, María Carmen Miravalles, Purificación Rueda); 10 del PP (César Rico, Ángel Carretón, Raquel Contreras, Ángel Guerra, Ramiro Ibáñez, José Antonio de los Mozos, Arturo Pascual, Jesús María Sendino, Inma Sierra y Borja Suárez); 3 de Ciudadanos (Cs) (Eduardo Munguía, Lorenzo Rodríguez y Laura Puente), y Nicasio Gómez por Vox.Tarea -la de dar voz a los miles de ciudadanos de la provincia-, que el presidente de la Institución, el popular César Rico, destacó en su discurso de investidura, tras renovar el cargo gracias a los 14 votos a favor emitidos por el PP, Cs y Vox, venciendo al candidato del PSOE David Jurado, que contó con los 11 votos socialistas.El Pleno fue el escenario de la jura y promesa de los servidores públicos, que iniciaron los corporativos más joven y más mayor -Alex Jiménez (al cederle dicha labor David Jurado) y Antonio Araúzo respectivamente, donde se dieron cita muchos asistentes. Entre ellos, autoridades militares y representantes políticos de todas las administraciones, así como familiares de los nuevos diputados provinciales y compañeros de partido, todos ellos en apoyo de los 25 nuevos representantes públicos.

Tras la elección del presidente por voto nominal, dio inicio el primer Pleno de la nueva corporación, con el acuerdo unánime de dar voz a los portavoces de los cuatro grupos: Nicasio Gómez (Vox), Borja Suárez (PP), David Jurado (PSOE) y Lorenzo Rodríguez por Ciudadanos. Gómez fue así el primero en intervenir, quien avanzó que uno de sus objetivos será «rebatir la campaña de desprestigio sufrida y demostrar que somos un partido civilizado, democrático y liberal, desde el que apoyaremos todo lo que sea en beneficio de la provincia y la lucha por evitar su vaciado».Se mostró en contra del aforamiento vasco «que vulnera la básica igualdad constitucional de los ciudadanos», y recordó Condado de Treviño, «por el que la Diputación tiene que tener un mimo especial al ser un enclave apetecido por otra autonomía vecina», recordó. A la par que mostró su apoyo a la Institución Provincial, «imprescindible para el funcionamiento de los ayuntamientos y a quien pensamos que la Junta debe delegarle más servicios y dotación económica suficiente, pues cada uno en su provincia conoce mejor las necesidades de su territorio».Tras él, Rodríguez remarcó la importancia que supone haber llegado a un acuerdo con el PP, «sumando así 13 representantes provinciales de dos grupos que haremos uso del diálogo, al que se ha dado primacía por delante de cargos y nombres». Avanzó así que lucharán por que «los municipios cuenten con banda ancha así como por reducir las competencias impropias de la Diputación, buscando que los pueblos reciban el dinero que es suyo». Labor que «será difícil, ya que habrá que contar con otras administraciones, por lo que les pedimos que nos den su confianza, porque hemos venido a trabajar», aseguró.Por su parte,el popular Borja Suárez felicitó al PSOE que resultó ganador de las elecciones, y al resto de grupos por el trabajo realizado, «que les ha llevado a poder representar a quienes les han votado en la Diputación. Lo que nos va a exigir a todos el mayor esfuerzo y desde la mayor honradez, ya que Burgos es una provincia conformada por cientos de pueblos, muy plural por sus comarcas y ayuntamientos, a todos y cada uno de los cuales nos debemos desde ya los diputados provinciales, sea cual sea el color político».Dirigió una segunda reflexión al equipo de diputados del PP -del que nuevamente forma parte-, «que aúnan conocimiento en la labor municipal que les permite saber lo difícil que es hacer prosperar sus pueblos», agradeció pidiendo que lo pongan «al servicio de la Diputación una vez más, lo que incluirá también consensuar entre partidos políticos y tender puentes entre instituciones, y ésa es una de las partes en las que debemos dejar el resto», animó.Concluyó con una tercera «y obligada reflexión en torno a un escenario que obliga a esta corporación años atrás con mayoría a entenderse con diferentes partidos», lo que tiene que permitir a la Diputación «proyectarse ya no solo para los próximos 4 años si no para asentar un trabajo común como muestra un ejercicio de lealtad a la vez que se remarcará la importancia de Burgos en el ámbito nacional».

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