El Correo de Burgos

Covarrubias insiste a la CHD para que le deje limpiar el río

El alcalde ha vuelto a pedir que les dejen podar algunos árboles Trabaja ya en el presupuesto de 2020, con la intención de llevarlo a Pleno a inicios de diciembre

El Arlanza transcurre por el centro de la villa rachela, lo que supone un gran atractivo pero también un peligro en algunos tramos por el mal estado de los árboles.-ECB

El Arlanza transcurre por el centro de la villa rachela, lo que supone un gran atractivo pero también un peligro en algunos tramos por el mal estado de los árboles.-ECB

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M. M.
Burgos

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El Ayuntamiento de Covarrubias ha remitido nuevas cartas a la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) para que permita a éste llevar a cabo labores de limpieza de los laterales del río, «ya que somos un pueblo ribereño a espaldas del río», criticaba semanas atrás el nuevo alcalde de la villa rachela, Millán Bermejo. «Y es que no nos dejan limpiarlo ni realizar, al menos, labores de poda de varios chopos que hay y que suponen un peligro al ser sus márgenes una zona por donde la gente pasea», añade Bermejo.Por ello y de cara a las próximas lluvias y nieves, el edil ha solicitado de nuevo dicho permiso. Confiesa que «lograrlo es una de las metas que nos hemos marcado en la que estamos inmersos junto a otros alcaldes de la comarca con los que compartimos estas reivindicaciones eternas al sentirnos todos igualmente abandonados».Bermejo explica que este arreglo en el río es uno de los muchos proyectos que ya tiene sobre la mesa desde su llegada a la Alcaldía rachela en mayo bajo la candidatura de Ciudadanos. «Todos ellos proyectos asumibles pero que sólo estamos estudiando, pues a día de hoy el presupuesto municipal está ya prácticamente gastado en numerosas iniciativas ya existentes antes de nuestra llegada».Presupuestos de 2020De ahí que sean proyectos que están dando aún sus primeros pasos para, si fuera posible, darles cabida en los presupuestos de 2020. «Ahora estamos presentando algunas propuestas para el contenido de éstos, pues querríamos tener un borrador presupuestario a principios de noviembre con la previsión de llevarlos a Pleno ordinario después del puente de diciembre», avanza.Sesiones plenarias que Bermejo destaca por su importancia no sólo como un trámite a realizar para llevar al día la administración municipal, «sino también como termómetro de las inquietudes vecinales, ya que nosotros los cerramos siempre con un tiempo para ‘ruegos y preguntas’ de los asistentes, con el fin de mantener la cercanía con los vecinos», destaca. Aunque es consciente de que «también se abre la puerta a los ‘rapapolvos’, pero es que entendemos que la accesibilidad es la base de nuestro trabajo».Labor en la que, insiste, lo importante es velar por dar servicios de calidad a los cerca de 600 empadronados con que cuenta la villa, pero también a los muchos más que se acercan en verano. «Una cifra vecinal que con el censo del agua de este mismo verano, he comprobado que se quintuplica, con lo que deben compaginarse propuestas para ese turismo que llega con iniciativas para los locales».Conscientes de que no existe una fórmula general para frenar la despoblación rural, avanza que una de sus primeras intenciones será buscar la forma de rebajar la carga fiscal de los empadronados, «que no se reduce sino que el Ayuntamiento asume esos gastos del empadronado buscando así ser fiel a quienes viven aquí todo el año».Y a la par, dar cabida a nuevas ideas con las que atraer población sin dejar de realizar los proyectos necesarios de mejora de lo existente. Así, una de ellas es la creación de huertos ecológicos en varias parcelas del entorno cercano. «Proyecto en el que trabaja personalmente el concejal de Medio Ambiente, José Ignacio Barbadillo, a la par ingeniero agrónomo», explica el alcalde, «con el que buscamos que la gente no sólo nos vivisite sino que se acerque e incluso se asiente, jugando con la necesidad de cuidados que requiere una plantación».Actuación aún en estudio «que podría comenzar en Covarrubias y extenderse por la comarca. incluida nuestra pedanía Ura», detalla. Remarca de hecho, la estrecha relación que mantiene Covarrubias con la pequeña localidad, teniendo hoy como empresa común lograr que la Junta o la Diputación se ocupen del cuidado de la carretera que une Ura con la vecina Puentedura, de apenas 4 kilómetros y propiedad de Ura. «Buscamos el apoyo de una administración mayor que se haga cargo de ella, pues es una zona muy transitada que requiere de un mantenimiento frecuente que solos no podemos cubrir».Y finalmente, avanzar en una lucha que viene de atrás como es lograr la fibra óptica en la localidad, «y que está hoy a falta de sólo cuatro trámites burocráticos ya que los técnicos de Telefónica nos han confirmado que a finales de 2020 tendremos fibra óptica», asegura.

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