La Policía evita en Burgos el intento de suicidio de un hombre tras agredir a su expareja
El incidente se produjo la pasada noche en una vivienda de Miranda de Ebro. El agresor fue detenido
Archivo - Imagen de archivo de un furgón de la Policía Nacional.
Agentes de la Policía Nacional destinados en la Comisaría de Miranda de Ebro evitaron durante la pasada madrugada la caída de un hombre desde el tejado de un edificio en Burgos. La intervención policial, producida en torno a las 00:15 horas, se inició tras una llamada al 091 en la que una mujer alertaba de la presencia de su expareja en su domicilio, quien la agredió físicamente y lanzó amenazas de muerte en presencia de un menor. El individuo, posteriormente localizado por los agentes sobre el tejado del inmueble, fue detenido en el lugar de los hechos.
Fuentes de la Policía Nacional aseguran que la actuación evitó una tragedia mayor, tanto para la víctima y su hijo como para el propio agresor, que presentaba una actitud extremadamente alterada e intentó lanzarse desde gran altura. La rápida intervención se produjo después de que la víctima detallara a los agentes la agresión y la huida del hombre por la escalera del edificio, lo que permitió su localización inmediata.
La intervención policial se desencadenó la pasada noche, ya en la madrugada del 2025, tras la llamada desesperada de una vecina de Miranda de Ebro. "Entró forzando la puerta, me agredió y me amenazó delante de mi hijo", relató la mujer en su declaración inicial ante los agentes. Una vez asegurada la protección de la víctima y el menor en la vivienda, los efectivos pusieron en marcha una búsqueda urgente del sospechoso, quien había escapado inmediatamente tras la agresión.
El dispositivo policial permitió localizar al hombre en el tejado del edificio colindante. Según la información proporcionada por la Jefatura Superior de Policía de Burgos, "el varón se hallaba en un estado de gran nerviosismo, manifestando clara intención autolítica". Los agentes mantuvieron un diálogo constante con él hasta conseguir que desistiera de arrojarse, logrando inmovilizarle en un momento de distracción y evitar así consecuencias fatales. Una vez seguro, fue reducido y detenido.
Durante la detención, el hombre mostró una conducta violenta y desafiante, incluso agrediendo a uno de los agentes, que precisó atención sanitaria por las lesiones sufridas. Según fuentes policiales, el detenido no solo profería amenazas e insultos durante la intervención, sino que además se negó posteriormente a recibir asistencia médica en el centro de salud donde fue trasladado en primer término, antes de su ingreso en dependencias policiales.
En el momento de la detención, al sospechoso le constaba en vigor una orden de alejamiento respecto a otra expareja, lo que agrava el contexto judicial y penal de este nuevo episodio violento. La víctima, por su parte, presentaba lesiones físicas visibles y un notable estado de nerviosismo y ansiedad, por lo que fue atendida por los servicios sanitarios desplazados a la vivienda.
Fuentes de la Comisaría Local de Miranda de Ebro destacaron "la profesionalidad, templanza y rapidez de los agentes intervinientes", enfatizando que "la actuación no solo resguardó la integridad de la víctima y del menor, sino que evitó consecuencias irreparables en el tejado". Desde la Policía Nacional, se ha reiterado el compromiso firme en la lucha contra la violencia de género y la protección de las víctimas, recordando la importancia de alertar inmediatamente a los servicios de emergencia marcando el 091 ante cualquier situación de peligro.
Además, se subraya que la colaboración ciudadana y la confianza en los cuerpos de seguridad son fundamentales para el éxito de las actuaciones, insistiendo en la necesidad de denunciar y de solicitar ayuda profesional, tanto en episodios actuales como si se detectan riesgos en el entorno próximo.