Los Nacimientos que desafían a las temperaturas más gélidas

Grupos de montañeros, de submarinistas y aficionados al senderismo han participado durante el fin de semana en las tradiciones para llevar belenes a lugares significativos de la provincia. Las cumbres del Mencilla y de San Millán, las frías aguas del pozo de Covanera y el castillo de Castrovido son algunos de los lugares que lucen ya los nacimientos que más desafían a las malas condiciones climatológicas.

Hasta el Pico Mencilla, en Pineda de la Sierra, subieron los miembros del Club Deportivo de Montañeros Burgaleses durante la mañana del domingo. También los montañeros del club de Pradoluengo desafiaron este sábado a la nieve, la niebla y las bajas temperaturas para llevar el belén hasta la cumbre de la provincia, el Pico San Millán. Fue una jornada dura para los montañeros que no dudaron en cumplir con una tradición que nació hace nueve años y que más que una prueba deportiva es una jornada de convivencia. Tras cumplir con la misión, los integrantes del Club de Montañeros de Pradoluengo celebraron una comida de hermandad en su localidad.

Por su parte, un equipo de submarinistas de la sociedad de buceo burgalés, Delfín Club Burgos, realizaron el sábado una inmersión especial en las frías aguas del Pozo Azul de Covanera para depositar el Belén, situado en el interior de una botella de buceo. Este Nacimiento fue bendecido previamente por el sacerdote de esta sociedad, quien presidió el acto. Este Belén se depositó a media agua dentro de la surgencia del sistema kárstico, para su visualización desde el exterior.

El Pozo Azul está situado en la población burgalesa de Covanera, en el valle de Sedano, y se trata de una surgencia de origen kárstico que ha sido explorada por miembros del programa de televisión 'Al filo de lo Imposible', entre otros buceadores. En total, son más de 6.410 metros de distancia desde la boca de entrada, lo que convierte a esta surgencia situada en las cercanías de la localidad de Covanera en la de mayor recorrido longitudinal de España.

Castrovido

El belén de la Asamblea Local salense de Cruz Roja concitó en la mañana de ayer, la participación de unas 30 personas que se «atrevieron» a recorrer la Ruta de Escipión hasta el castillo de Castrovido para colocar, en la pared sur de la atalaya, las figuras del Misterio cristiano.

Una vez realizado el recorrido, que estuvo dominado por el hermoso paisaje nevado y un cielo totalmente despejado, los asistentes repusieron fuerzas con dulces y chocolate caliente, y después entonaron animadamente unos cuántos villancicos. La entrada en el castillo, y la subida hasta la pasarela superior para contemplar las vistas extraordinarias que ofrece tal mirador, fueron dos citas obligadas antes de iniciar el regreso.

Pero antes de finalizar, la excursión recibió en Castrovido un reconfortante refrigerio que estuvo ambientado por la música de unos cuántos miembros de la Agrupación Musical «Alfoz de Lara», uno de cuyos momentos recoge la fotografía.