Las matronas del Santos Reyes, en contra del nuevo turno de 12 horas

LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Las siete matronas que actualmente trabajan en el hospital Santos Reyes están decididas a ir a por todas para evitar que el 1 de enero se ponga en marcha el cambio de turno aprobado por la dirección de Enfermería, con el que pasarán de trabajar turnos de 24 horas a turnos de 12 horas. Según la dirección, la medida se toma para mejorar el servicio asistencial a las pacientes. Pero los argumentos no convencen a estas profesionales, que aseguran llevan muchos años con el turno de 24 horas y siempre han dado un servicio de calidad.

«Llevamos con este turno catorce años y la calidad siempre ha sido muy buena, similar a la que se da en otros hospitales de semejante nivel como el hospital de Miranda, el de Medina del Campo, el de Segovia o Ávila», explican las afectadas, quienes consideran que el cambio responde más a una «torcedura de rosca de la dirección de enfermería», que ha tomado esta decisión sin contar con el consenso de los trabajadores,. «Algo que no ocurre en otros servicios o unidades del área de Burgos», añaden.

La dirección se acoge al Decreto 61/2005 que regula la jornada laboral y el horario del personal del Sacyl, «pero contempla ambos horarios por lo cual, está claro que se trata de una imposición», subrayan.

Respaldo de sus compañeros

Por el momento, las matronas han encontrado el apoyo del servicio de Ginecología y Obstetricia del hospital, quienes reiteran que los protocolos del servicio de atención al parto requieren una atención continuada, que se garantiza con el actual turno de 24 horas.

También cuentan con el respaldo de los auxiliares de enfermería del servicio de partos -que avalan la profesionalidad de sus compañeras-, del servicio de anestesia y de la asociación Lactoaranda, la cual valora la necesidad de que una misma matrona sea la que acompañe a la madre en un momento tan decisivo. Entiende también que la reducción de jornada supondrá un empeoramiento de las condiciones asistenciales y dificultará la contratación y duración de las matronas.

En este sentido una de las matronas afectadas por el nuevo turno, Carmen Redondo, explica que su incorporación al hospital ribereño se debió precisamente a que existía ese turno, ya que por motivos personales se ve obligada a cuidar a sus dos padres ya mayores que residen en Burgos., «y el turno de 24 horas me permite conciliar la vida laboral y familiar», sostiene.

No es el único caso. De las cinco matronas con plaza fija, una con comisión de servicio y otra que cubre vacaciones e incidencias, sólo una vive en Aranda; las demás residen en Valladolid y en Burgos.

Un trabajo de calidad

El polémico cambio de turno que se pondrá en marcha a partir del 1 de enero, comenzó a gestarse en el mes de abril. «Desde entonces estamos peleando por defender un trabajo de calidad», declaran las matronas. Y es que, una de las cosas que más ha dolido a las matronas es el argumento esgrimido por la dirección en el que sostienen que el cansancio de las 24 horas repercute en la asistencia a las parturientas.

«Podemos aceptar que impongan un turno, pero lo que no aceptaremos s que nos digan que no trabajamos bien», critica. Aclara además, que hasta llegar a este punto de presentar un recurso de alzada han seguido «todas las posibilidades lógicas del organigrama», comentan. "Hemos llegado incluso al mismísimo consejero de Sanidad, pero nadie nos ha dado ninguna respuesta», aseguran.

De no arreglarse, las matronas advierten que acudirán a la vía de lo Contencioso Administrativo, porque según cuentan, aunque desde la dirección venden la medida como una oportunidad de mejora, con el cambio de turno, muchas se verán obligadas al final a pedir el traslado.