El parque de bomberos no prestará servicio fuera de Aranda de Duero

LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Como asunto de urgencia, la Junta de Gobierno Local aprobó ayer suspender de forma temporal el convenio de bomberos con la Diputación de Burgos, por lo que a partir del próximo 8 de julio, el parque de bomberos de Aranda dejará de prestar servicio fuera del término municipal. Una decisión, que según el concejal responsable del área, Máximo López, no ha sido fácil adoptar, pero que responde «a la difícil situación» actual del servicio. «Como Ayuntamiento estamos siempre dispuestos a colaborar con otras administraciones pero a día de hoy es completamente imposible por la escasez de medios», argumenta.

La medida no afectará a los accidentes de tráfico ni a cualquier otro siniestro en el que peligren vidas humanas. «En estos casos seguirán saliendo», garantiza el concejal. Los efectivos, no acudirán sin embargo, a socorrer incendios forestales (si no afectan a personas), cuya competencia corresponde a la Junta de Castilla y León.

Esto no significa, aclara, romper el convenio con la Diputación, cuya aportación anual, recuerda, (107.000 euros en 2011 y 118.609 en 2012) no cubre todos los gastos que se generan. «Lo que cuesta articular el segundo retén es bastante más», observa sin querer entrar en cifras concretas. En cualquier caso, advierte, «el servicio se retomará en cuanto "cambien las circunstancias de una situación generada por los propios trabajadores del servicio que ya no prestan el segundo retén».

Y es que, según Máximo López, «no es un tema de inseguridad sino  de reivindicaciones salariales», que aunque «legítimas» no deben servir para «desviar la atención», afirma. «Los bomberos están en la misma situación que en los últimos años»,  considera mientras recuerda que el Ayuntamiento no puede aumentar las horas extras, porque incumpliría el convenio de funcionarios. Estipula que las horas extras deben limitarse (con el objeto de crear empleo) a 20 horas como máximo al mes, 50 horas como máximo al semestre y 80 horas como máximo al año. Tampoco, añade, se puede ampliar el número de efectivos, porque así lo impone en Real Decreto de 30 de diciembre de 2011 (por el que se prohibe incrementar las retribuciones de personal al servicio del sector público y de la masa salarial).

La respuesta de los bomberos no ha tardado en llegar y en palabras del representante sindical, Javier Puente, la medida adoptada por la Junta de Gobierno es arriesgada porque nunca se sabe cuando incendio puede poner en riesgo la vida de las personas. «Si un contenedor no se apaga a tiempo puede extenderse afectando a una casa, por ejemplo», sostiene mientras advierte de que si el Ayuntamiento suspende el convenio, la Diputación puede pedir una indemnización.

«A lo mejor les sale más caro que pagarnos lo que pedimos, que al fin y al cabo, somos los que nos jugamos la vida. Necesitamos trabajar con garantías», concluye Puente.