La oleada de robos en las empresas se extiende ahora a las viviendas

LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Si hasta ahora los robos se habían centrado en empresas o bares, los ladrones han añadido a su lista otro objetivo: las viviendas. Es el caso de una vecina de Quintanarraya que ayer sufrió un asalto mientras dormía. «Cuando oí ruidos pensé que era mi yerno, que volvía de trabajar, pero cuando vi el reloj, era demasiado pronto. Eran las 3.20 de la mañana y cuando me asomé al pasillo, vi una luz de una linterna que cuando pregunté, ¿quién había?, se apagó. Entonces fui a despertar a mi hija y llame a la Guardia Civil», explica con el susto aún en el cuerpo y agradecida porque los ladrones huyeron al escuchar la llamada a las fuerzas de seguridad, que tardaron muy poco tiempo en llegar al lugar de los hechos. «No se llevaron nada y tampoco forzaron la puerta», subraya decidida a dejar, a partir de ahora, la llave siempre puesta. «Están robando por todas partes», lamenta impotente el alcalde de Quintanarraya, Ambrosio Peñalba.

También en Coruña del Conde y en Caleruega, dos familias vivieron un episodio similar, aunque por suerte, no había nadie en las viviendas en el momento del hurto.  «Van a por dinero y joyas», explica el alcalde de Caleruega, José Ignacio Delgado, quien advierte de que la policía sospecha que los asaltantes provienen del Este.

Y es que, hace un mes, ocurrió lo mismo en Huerta del Rey, una casa particular que fue asaltada mientras los propietarios regresaban de Burgos. Más información en edición impresa