El Correo de Burgos

La vendimia se generalizará en la Ribera del Duero la próxima semana

El Consejo Regulador asegura que las lluvias no han mermado la calidad de la cosecha

Burgos

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LORETO VELÁZQUEZ / Aranda

Tras unos días en los que la lluvia ha obligado a los viticultores a estar muy pendientes del cielo, las predicciones son esperanzadoras, por lo que todo parece indicar que la vendimia se generalizará en la Ribera del Duero a lo largo de la próxima semana y la siguiente.

Aunque Conde de San Cristóbal dio el pistoletazo de salida el pasado 15 de septiembre, hasta ahora sólo 25 bodegas -la mayoría de variedades blancas-, han emprendido la tarea de recogida. Así, a las doce horas del martes 23 de septiembre, apenas había entrado un millón de kilos de uva en las instalaciones.

Según explican desde el Consejo Regulador, las precipitaciones que han acaecido en las últimas horas han ralentizado ligeramente la maduración de la uva, lo cual ha retrasado el inicio de la vendimia que hace tan sólo un par de semanas, parecía que iba a comenzar de manera generalizada en la Denominación de Origen (DO). «Por la magnífica sanidad que presentaba el cultivo, estas lluvias no han puesto en riesgo la calidad de la uva», garantizan con la esperanza de que la climatología en los próximos días sea la tradicional en estas fechas en la Ribera del Duero, «con buena iluminación y temperaturas altas en las horas diurnas y valores térmicos más frescos por la noche».

Sistema de control

Como cada año, el Consejo Regulador ha puesto a punto un exhaustivo sistema de control de la cosecha de uva para garantizar el cumplimiento de la normativa en la Denominación de Origen. Con este objetivo, contará con 225 auxiliares de veedor, que han sido formados por el departamento técnico.

«Entre los auxiliares contratados, unos ejercen de peritos aforadores y se encargan de controlar el rendimiento en parcela y cuantificar la cantidad de uva por hectárea, para asegurar que no se exceden los límites reglamentarios permitidos», detallaron. «Mientras que el resto de los auxiliares desempeña la función de controlar la cantidad y la calidad de la uva que entra en bodega», explican desde el Consejo.

Todo el proceso está, además, informatizado, de manera que los datos se actualizan continuamente, y es posible saber en qué momento exacto se encuentra la vendimia, cuántos kilos se han recogido y cuántas bodegas permanecen todavía abiertas.

Recolección

Hay que recordar que 8.372 viticultores y 205 bodegas participan este año en una vendimia que se llevará a cabo en las 21.800 hectáreas inscritas en la Denominación de Origen, de las cuales un 90 por ciento son de Tempranillo.MÁS INFORMACIÓN EN EDICIÓN IMPRESA

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