El Correo de Burgos

El PSOE se une al PP para pedir la reapertura urgente del tren directo Madrid- Aranda-Burgos

La votación ha tenido lugar en la Asamblea de Madrid y se ha aprobado con el respaldo de todos los partidos

Imagen de archivo de una protesta por el tren directo. ECB

Imagen de archivo de una protesta por el tren directo. ECB

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Aunque el ministro socialista de Transportes, Óscar Puente, tumbó hace unos días el futuro del tren Directo Madrid-Aranda-Burgos, asegurando que el precio de la rehabilitación rondaba los 1.300 millones y era demasiado costoso; el PSOE ha decidido apoyar una propuesta del Partido Popular en favor de la reapertura urgente de la línea ferroviaria. La Proposición No de Ley (PNL) lanzada por PP en la Asamblea de Madrid ha contado además con el apoyo de todos los grupos, incluidos Vox y Más Madrid.

Según lo aprobado en el Pleno, la Asamblea de Madrid pide al Gobierno de la Comunidad de Madrid a que inste al Gobierno Central a "iniciar urgentemente la redacción del proyecto de acondicionamiento de la totalidad del eje industrial, comercial y turístico de conexión ferroviaria directa entre Madrid y Burgos, así como su posterior reapertura al tráfico".

Desde la Plataforma por el Tren Directo celebran este consenso. “El Directo se merece una oportunidad”, apremia el presidente del colectivo, Jorge Núñez.

Según explica esta PNL, se enmarca dentro de una estrategia que comenzó a gestarse en noviembre de 2023 con el objetivo de aprobar mociones en favor del tren directo en los ayuntamientos de Burgos, Segovia, Junta de Castilla y León y Madrid. “En todos se ha aprobado la reapertura, pero lo más importante que era la inclusión en el Corredor del Atlántico lo han dejado a un lado y es fundamental”, urge.

La línea del ferrocarril directo Madrid - Burgos, pasando por Aranda de Duero fue inaugurada por RENFE el 4 de julio de 1968 y cuenta con 282 kilómetros que unen de la forma más directa Burgos con Madrid. 

Su trayectoria se truncó en el año 2011 cuando un derrumbe en el interior del túnel de Somosierra dejó una bateadora atrapada, que supuso el cierre de la conexión ferroviaria entre Madrid y Aranda de Duero.

Desde entonces, ciudadanos y empresas han exigido la reapertura a una clase política que hasta ahora no ha dado el paso definitivo. “La oposición ya ha hecho su papel. Ahora la pelota está en el tejado del PSOE”, apremia Jorge Núñez.

Desde el PP insisten en la importancia de la reapertura, al entender que el cierre está causando un perjuicio económico para el transporte de mercancías por ferrocarril y de personas “desde y hacia la provincia de Burgos y Madrid”. “En relación con el transporte de viajeros, se ha generado un perjuicio directo a los habitantes de la región de Aranda de Duero mientras que, para el resto de los habitantes de la provincia de Burgos, el cierre de la línea ha quedado en un aumento de los tiempos para desplazarse a Madrid por ferrocarril”.

Sin embargo, añaden, “es para el transporte de mercancías procedente o con destino Madrid”, donde se ha creado un mayor quebranto. “En la actualidad, los trenes de mercancías que deberían realizar su trayecto por el ramal central deben dirigirse a la ciudad de Valladolid, con un aumento de más de 100 kilómetros en la ruta y los consiguientes aumentos de costes económicos y medioambientales”, argumenta el Partido Popular.

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